El secretario general de Amnistía Internacional (AI), Salil Shetty, instó hoy al presidente, Enrique Peña Nieto, a vetar la Ley de Seguridad Interior, recientemente aprobada por el Congreso y que formaliza el papel de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública.

 

“Bajo la vaga e indeterminada frase ‘seguridad interior’, la ley no hace más que esconder un esfuerzo concertado y peligroso de mantener a las fuerzas armadas en labores que deben corresponder a las Policías”, dijo el secretario general en un boletín.

 

Shetty dirigió una carta abierta a Peña Nieto llamándolo a vetar la Ley de Seguridad Interior que fue aprobada en el Congreso el viernes y en nombre de una organización que representa un movimiento de más de 7 millones de personas en todo el mundo.

 

AI es uno de las voces internacionales que se encuentra “enormemente preocupada que la implementación de esta ley”, indicó el texto.

 

“Sin duda alguna, no hará más que aumentar la larga lista de violaciones graves a los derechos humanos en México, incluyendo ejecuciones extrajudiciales, tortura y desapariciones forzadas”, agregó la asociación.

 

Esto a pesar de que la evidencia demuestra que esta estrategia “ha fallado en brindar seguridad durante más de una década”, cuando se desplegaron militares en las calles de México en el marco de la llamada guerra contra el narcotráfico del entonces presidente Felipe Calderón (2006-2012).

 

En una visita a México hace cuatro años, Shetty ya alertó al presidente sobre la estrategia militarizada.

 

“El número de militares desplegados en tareas de seguridad pública ha aumentado de manera significativa durante el actual periodo presidencial. Este aumento no ha contribuido a una disminución del delito en el país”, indicó el texto.

El año 2017 terminará como el año más violento de la actual administración, y vislumbra registrar la tasa de homicidio más alta en por lo menos una década.

 

“Esto es un momento de agonía para los y las ciudadanos mexicanos, quienes han sido ignorados por un Congreso que, de manera intencional, ha hecho caso omiso del clamor público alrededor de esta ley. Si el presidente decide firmar esta legislación, estaría poniendo en riesgo los derechos humanos de millones de personas,” dijo Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas de AI.

 

 

Finalmente, AI pidió a los candidatos y las candidatas para la elección presidencial de 2018 que pidan al presidente Peña Nieto el veto de la ley.

 

El nuevo ordenamiento ha causado gran controversia. Mientras para algunos es una forma de regular el papel de los militares en actividades que llevan realizando una década, para otros perpetúa su presencia en las calles en un país con 150.000 muertes vinculadas al crimen organizado en ese lapso y más de 30.000 desaparecidos.

 

JMSJ