De acuerdo con la nutrióloga Andrea Vara, la alimentación en estas fechas debe controlarse en mayor medida, pues los platillos que se disfrutan el 24 o el 31 de diciembre se consumen una vez al año, por lo quese puede abusar de las porciones alimenticias.

“Tengo pacientes que vienen desde dos meses antes de diciembre para comenzar el tratamiento alimenticio así como controlar su dieta. Al término de las fiestas recuperan su peso o lo suben, aproximadamente es de 2 a 5 kilos. Sin embargo, una persona que no tiene control de su comida, aumenta 5 tallas más sin tener conciencia de la cantidad de calorías que se tiene en los platillos”, resaltó la especialista.

Los romeritos, el bacalao, la ensalada de manzana, el refresco, el alcohol y la botana previo a la cena son factores que ponen en riesgo el aumento de tallas, diabéticos e hipertensos tienen mayor riesgo de padecer los estragos del Guadalupe-Reyes.

La licenciada Vara recomienda que para evitar los kilos de más, se consuman porciones pequeñas y no repetir platillos ya que el tiempo de digerir los alimentos tarda más en la noche.

“Se puede comer de todo un poco, pero en porciones pequeñas y balancearlo. Por ejemplo, un plato grande cabe 4 porciones pequeñas de ¾ cada uno, es decir, una cucharada grande de bacalao, pero compensarlo con una ensalada, pero hay que tener cuidado con las pastas porque ésta no engorda si no se prepara con crema, mayonesa o jamón y no repetir plato”; indicó la nutrióloga.

Previo al 24 o 31 de diciembre, la gente suele no comer a sus horas y eso provoca el aumento de peso, sin embargo, Andrea sugiere que se realicen las 5 comidas al día, una cada 3 horas y así se evitará comer en la cena de golpe y el cuerpo no lo resentirá.

“A veces por estar con las prisas de preparar la cena del 24, no se come durante el día y eso esta mal porque hay un periodo largo y ahí rompemos con los horarios de comidas. Entonces yo recomiendo que antes y después se haga un ayuno, así no se provocará otras enfermedades como gastritis o el sobrepeso”, dijo la nutrióloga.

Por último exhorta a la población mexicana que si hay familiares diabéticos o con hipertensión arterial, no preparar alimentos que sea dañinos a su salud y así se pueda disfrutar de una Buena velada y al día siguiente del recalentado sustituir en los horarios fuertes y las colaciones que sea fruta o ensalada.

“Muchas veces los diabéticos e hipertensos se les antoja comer gelatina o el lomo, pueden realizarlo siempre y cuando sea balanceado o bien preparar otro tipo de cena saludable como el ceviche, ensaladas verdes o mariscos, así no habrá remordimiento de conciencia en el peso de cada individuo”; finalizó la nutrióloga.

PL