WASHINGTON.- Una treintena de jóvenes indocumentados, conocidos como dreamers, el grupo más numeroso invitado a un informe de gobierno en Estados Unidos, demandaron ayer al presidente Donald Trump un trato digno y respetuoso, y que deje de usarlos en sus negociaciones con los demócratas.
Los jóvenes indocumentados, que fueron invitados por legisladores demócratas y republicanos, aparecieron acompañados por sus anfitriones para recordar al presidente y al Congreso la urgencia de una solución para el programa DACA, cuyo proceso de expiración empieza el 5 de marzo.
“El presidente Trump nos tiene que aceptar como estadunidenses, porque hemos contribuido muchísimo al país. Nuestro mensaje es que abra su corazón y que entienda que somos gente contribuyente”, dijo Paulina, una joven nacida en México y quien viajó a esta capital desde California.
La visita de los jóvenes en el Capitolio fue sacudida por la noticia de que el legislador republicano Paul Gosar llamó al procurador Jeff Sessions y al jefe de la Policía del Capitolio para que arrestaran a los indocumentados que asistieran al Mensaje sobre el Estado de la Unión.
“Cualquier extranjero ilegal que intente pasar seguridad, bajo cualquier pretexto de invitación, debería ser arrestado y deportado”, sostuvo Gosar.
Aunque técnicamente los “dreamers”, beneficiarios del Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA), tienen estatus legal temporal y no serían arrestados, la acción de Gosar indignó a la presidenta del Grupo Legislativo Hispano, Michelle Lujan Grisham.
Rodeada por jóvenes en un recinto del Capitolio, la legisladora dijo sentirse “conmocionada” ante el hecho de que un miembro del Congreso decida continuar “con esta retórica de odio contra estos extraordinarios estadunidenses”.
Lujan Grisham cuestionó además la decisión del presidente Trump de condicionar la ciudadanía para los dreamers, a cambio de 25 mil millones de dólares para la construcción del muro en la frontera con México y reducir los flujos de migración legal.
Condicionar el alivio migratorio “a otros asuntos antiinmigrantes es completamente inapropiado e injusto y lo estamos rechazando , creemos que más republicanos moderados y más demócratas se están educando en estos asuntos y se están solidarizando con la justicia”, señaló.
Aunque la presencia de los dreamers ha sido usual en los mensajes presidenciales desde 2014, cuando el entonces presidente Barak Obama invitó a una indocumentada mexicana, en esta ocasión tuvo lugar un esfuerzo concertado de una treintena de legisladores para invitar a los jóvenes migrantes.
La abrumadora mayoría de los legisladores anfitriones son demócratas, aunque también republicanos como Carlos Curbello, de Florida, invitó a un “dreamer” como su huésped de honor en el mensaje presidencial.
Astrid Silva, en esta ocasión invitada por el legislador de origen mexicano Rubén Kihuen, quien se describe como el primer dreamer electo al Congreso, recordó que su asistencia al informe de 2014 fue “controvertido y riesgoso”.
APOYO A MIGRANTES. La líder de los demócratas en la Cámara de Representante, Nancy Pelosi, acompañó a los dreamers y reiteró la necesidad darles una solución.
CONTRA EL ACOSO. Miembros de la Cámara de Representantes y del Senado acudieron vestidos de negro en apoyo al movimiento “MeToo”.
JMSJ