París.- El Tribunal Supremo francés ha anulado la condena de dos años de cárcel sin cumplimiento dictada en segunda instancia contra el electricista de Pablo Picasso y su esposa, después de que se hallaran en un garaje de su propiedad 271 obras del artista malagueño, informaron hoy medios locales.
El Supremo consideró que el Tribunal de Apelación de Aix-en-Provence, en el sureste de Francia, no “reunió todos los elementos constitutivos de una infracción”, por lo que ordenó que el caso vuelva a ser juzgado, en esta ocasión en el Tribunal de Apelación de Lyon.
Para la máxima instancia judicial francesa, en el pasado juicio no quedo demostrado que los bienes que atesoraban Pierre y Danielle Le Guennec provenían de un robo, tal y como había establecido el tribunal.
La corte de Apelación condenó, además, a los Le Guennec a entregar a la familia las obras que estuvieron en su poder durante casi 40 años.
Se trata de obras fechadas entre 1900 y 1930, algunas de ellas raras, y con un valor estimado en más de 60 millones de euros (73,9 millones de dólares), según algunos medios franceses.
El que fuera el último electricista del artista y su esposa aseguraron durante el proceso en 2015 que fue el artista quien les regaló las obras como agradecimiento a los servicios prestados como electricista durante el periodo comprendido entre 1970 y 1973.
En Apelación cambiaron la versión y aseguraron que en realidad fue un regalo de la viuda del artista, Jacqueline Picasso, que les regaló las obras tras la muerte del maestro.
Aseguró que no dijo eso en el primer juicio por miedo a que acusaran a la viuda del artista de haber ocultado obras de Picasso.
Aunque durante años no le dieron gran valor, cuando en 2010 organizaron su propia herencia, pidieron autentificar la colección de dibujos, bocetos, litografías y collages, y al salir a la luz, los herederos de Picasso les acusaron de receptación.
fahl