Las listas –y listos- del PRI
En las listas de candidatos al Congreso por la vía plurinominal pesan tanto los que están como los que no están.
Mucho se especuló si Gerardo Ruiz Esparza o Rosario Robles, ambos envueltos en escándalos de origen financiero, alcanzarían el beneficio del fuero constitucional.
Pero no.
Por alguna razón, pese a que en las listas preliminares siempre figuraban sus nombres, al final el PRI –o su dirigente real, no el formal-, decidió que sería un lastre su candidatura.
Dos ex secretarios de Estado sí se colaron a las listas; el primer compadre del país, Luis Miranda, será diputado federal, y José Calzada Rovirosa es el suplente del dirigente cetemista, enfermo desde hace meses, Carlos Aceves del Olmo, quien aparece en la segunda posición de los candidatos plurinominales al Senado.
En la elección federal de 2012, el PRI alcanzó 10 posiciones plurinominales en el Senado.
Según los cálculos de connotados priistas, si la elección se fuera a tercios, el PRI podría alcanzar máximo las mismas 10 posiciones, aunque en escenario realista, se prevé que no pasará de ocho.
Y justo el número 10 de la lista es Pablo Gamboa Miner, hijo de Emilio Gamboa Patrón.
En el número 11 de la lista fue integrada Carolina Viggiano, esposa del ex gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, quien a su vez fue colocado en el lugar número tres de la segunda circunscripción de la lista plurinominal para la Cámara de Diputados.
Viggiano se disputaba la candidatura plurinominal al Senado con Nuvia Mayorga, cercanísima a Miguel Ángel Osorio Chong –éste colocado en el lugar número cuatro de la lista para senadores-, pero al final esta última ni siquiera alcanzó lugar en la lista de diputados federales.
¿Por qué fue?
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En donde el PRI echó toda la leña al fuego fue en la lista plurinominal de la quinta circunscripción para la Cámara de Diputados.
Encabezando la lista se ubica el presidente del tricolor, Enrique Ochoa Reza; en segundo lugar, Ana Lilia Herrera Anzaldo; en tercero, Luis Miranda, y en cuarto, Marcela Velasco González, que fue subsecretaria de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud y secretaria de Desarrollo Urbano en el gobierno del estado de México con Peña.
En quinto lugar quedó Brasil Alberto Acosta Peña, miembro de la dirección nacional de Antorcha Campesina (y luego se quejan).
En el lugar siete Ximena Puente, comisionada del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos, el mismo que presidió de 2014 al 2017.
En el lugar ocho el PRI postuló al general Fausto Manuel Zamorano Esparza, presidente Nacional de Unidad Revolucionaria y en el noveno lugar a Paula Hernández Olmos, coordinadora de Prospera.
Puro power mexiquense.
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Ayer quedó claro que la estructura formal de SNTE, encabezado por el (ex) hijo preferido de la profesora Elba Esther Gordillo, Juan Díaz de la Torre, apoyará la campaña de José Antonio Meade.
Pero la estructura disidente en muchos estados ha permanecida adormecida, lo que ha provocado que (erróneamente) el Gobierno la minimice; ésta se la jugará con Morena y López Obrador, quien les ha prometido revertir la reforma educativa.
Un dulce que no muchos maestros se atreven a rechazar.
JNO