París.- La OCDE recomienda a México que levante los obstáculos a las inversiones extranjeras porque, al igual que el bajo nivel educativo, es una de las razones de su baja productividad y explica su “amplia y persistente brecha” con otros países desarrollados.
En su informe anual Apuesto por el crecimiento publicado este lunes, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) subraya que “para hacer frente a la escasa productividad, resulta esencial impulsar la capacidad de la economía para adoptar y adaptar tecnología y conocimientos extranjeros”.
Por eso sus grandes prioridades para México son “aumentar el nivel educativo, reducir aún más los obstáculos para la inversión extranjera directa y las empresas de reciente creación, así como reforzar las políticas de innovación”.
Sobre la inversión extranjera, los autores del estudio citan “sectores clave” como el transporte o la banca y añaden que también hay que mejorar el entorno empresarial para atraer dinero del exterior a los servicios, lo que pasa por más transparencia en las políticas regulatorias.
En ese terreno, aconsejan promulgar y aplicar “una segunda ronda de reformas legales en el ámbito civil y mercantil”, seguir con la transición de los juicios escritos y los orales para mejorar los resultados en los litigios económicos y completar el establecimiento de sistemas anticorrupción a nivel estatal.
Igualmente, para promover el empleo formal, se pronuncian por facilitar la competencia con menos reglas para entrar en los servicios y en profesiones reguladas y por menos requisitos para la concesión de licencias en el comercio minorista.
“Un impulso renovado de las iniciativas de lucha contra la corrupción y la informalidad contribuirá a que el crecimiento sea más incluyente”, argumentan, tras recordar que los niveles de desigualdad en México se mantienen “entre los más altos de la OCDE, en particular debido a la elevada prevalencia de la pobreza“.
La organización reconoce que se ha llevado a cabo una evaluación de casi todo el profesorado y se ha invertido en mejorar las infraestructuras de los centros escolares, pero insiste en que hay que incrementar el nivel educativo, concentrando el gasto en la educación preescolar, primaria y secundaria.
También cree que debe reforzarse la capacitación del profesorado, y establecer programas institucionales basados en méritos.
La OCDE explica que México ha introducido un nuevo régimen que permite deducir fiscalmente un 30 % del incremento en gastos de I+D (investigación y desarrollo), pero también que hay que hacer más en ese terreno.
En concreto, promoviendo la financiación en las primeras etapas de las nuevas empresas, con cooperación de la industria con los institutos de investigación o con programas públicos que favorezcan la innovación en las empresas locales y los vínculos con filiales extranjeras.
JNO