Raúl Julio Escobar Poblete, el chileno detenido el 30 de mayo de 2017 en San Miguel de Allende, Guanajuato, acusado de secuestro, envió una carta al juez de oralidad que lleva su caso en la que acusa tortura luego de su detención, fallas en el debido proceso y ser víctima de un montaje por parte de la policía local y el Ministerio Público.
Fechada el 12 de diciembre de 2017, pero entregada al impartidor de justicia a principios de febrero, la misiva, de la cual 24 HORAS obtuvo una copia, está escrita a mano y cada una de las 30 hojas están firmadas con el seudónimo Ramón Alberto Guerra y contienen dos huellas digitales.
Escobar Poblete fue capturado luego de ser señalado por un taxista de haber sido él quien le entregó un paquete que contenía una carta escrita por una mujer secuestrada, supuestamente, y un dedo.
Su caso causó revuelo, pues después de su detención se descubrió que el hombre que se hacía llamar Ramón Alberto Guerra Valencia era en realidad el Comandante Emilio, un ex combatiente de la dictadura Pinochetista en Chile, y sobre quien pesaban órdenes de aprehensión de la Interpol por estar acusado de terrorismo.
Sin embargo, casi 10 meses después, aseguró, en dicho documento, que es inocente, incluso señaló: “las autoridades corruptas que me apresaron solo intentan ‘presentar trabajo’ y engañar al público (y al Poder Judicial) al tomar el recurso fácil de presentar a un extranjero en situación de vulnerabilidad, como aparente culpable de unos delitos que son ellos la policía y la mafia local los que los realizan”.
Escobar Poblete afirmó que el secuestro que se le imputa y muchos otros delitos son realizados, en su opinión, por personas a las que se refiere como la mafia local y que delinquen impunemente.
También hizo una relatoría de las pruebas que no ha podido presentar y que, dijo, demostrarían su inocencia.
JNO