Míriam acababa de cumplir 18 años. El 27 de marzo abordó un Uber en la ciudad de Culiacán y desde entonces su familia no volvió a saber nada de ella, según la versión de cercanos a la joven.
De acuerdo con su familia, la joven se dedica a vender ropa y cuando salió dijo que iría a hacer cobros, que más tarde volvería. Pero ya nadie la volvió a ver.
El día de su desaparición, la familia acudió al Ministerio Público luego de varias horas en las que la chica no respondía el teléfono, pero las autoridades les pidieron esperar porque “en ocasiones las mujeres regresan solas”, y aseguraron que que podía estar con su novio.
Familiares relatan que cuando finalmente el Ministerio Público tomó el caso, asignó a dos policías de investigación, sin embargo, no les entregó el acta de denuncia.
Cuando la familia se presentó a las oficinas de Uber en la capital de Sinaloa para pedir información sobre el viaje de Miriam, la compañía respondió que no podía proporcionar datos si no exhibían copia del acta de denuncia.
Al llegar el periodo vacacional de Semana Santa, según familiares de la joven, el Ministerio Público retiró a los policías de investigación del caso, desde entonces emprendieron una búsqueda por su propia cuenta.
Sobre este hecho, le empresa Uber señaló: “Nos unimos a la preocupación de la gente de Culiacán por la desaparición de Míriam Aguilar. Confirmamos que el último viaje de Míriam a través de su cuenta de Uber se realizó varios días antes de su desaparición y concluyó sin complicaciones. Asimismo, podemos confirmar que no hizo ningún viaje desde su cuenta de Uber el día de su desaparición.
Estamos colaborando con las autoridades de Culiacán para proporcionar cualquier información que pueda ser relevante en las investigaciones.”
Con información del diario Noroeste
ot