WASHINGTON.- El presidente de EU, Donald Trump, planea mandar entre 2 mil y 4 mil militares a la frontera con México.
Así lo señaló el mandatario al ser cuestionado por periodistas un día después de ordenar a su Gobierno que organice el despliegue de elementos de la Guardia Nacional en la zona limítrofe para combatir la inmigración ilegal.
“Probablemente los mantendremos a todos o a una parte grande de ellos” hasta que el muro esté construido, añadió Trump, quien dijo que su Gobierno todavía está “viendo” cuánto dinero costará ese despliegue a los estados fronterizos.
Trump ordenó el miércoles pasado a su Gobierno trabajar con los gobernadores fronterizos para desplegar “lo antes posible” los miembros de la Guardia Nacional en la zona limítrofe.
El Gobierno de Trump ha atribuido la decisión al aumento de aprehensiones de indocumentados en febrero y marzo de este año, además de a la inacción del Congreso respecto a los intentos de reforma migratoria del presidente.
No obstante, el anuncio llegó poco después de que Trump se enfureciera al enterarse de que una caravana de cientos de inmigrantes centroamericanos recorría México en dirección a EU.
Al respecto, mientras continúa con los planes de desplegare a los militares en la frontera, Trump elogió, vía Twitter, las leyes migratorias de México y alabó al Gobierno mexicano por haber puesto fin a la movilización de inmigrantes.
“La caravana está disuelta en gran medida gracias a las fuertes leyes migratorias de México y su voluntad para usarlas de modo que no se causase una gigantesca escena en la frontera”, afirmó Trump, quien terminó su mensaje en Twitter con la frase: “¡Detengamos las drogas!”.
No obstante, los integrantes de la caravana aseguraron ayer que que continúan con su recorrido por México, aunque no planean llegar a EU, sino que culminarán su trayecto en la capital mexicana.
APOYARÁN A LA PATRULLA FRONTERIAZA
Trump, además, consideró ayer que los niveles de detenciones en la frontera con México siguen siendo “inaceptables”, aunque en el año fiscal anterior (de octubre de 2016 a septiembre de 2017) se registró la cifra más baja de arrestos desde 1971, con 310 mil detenciones.
En declaraciones a la prensa en la Casa Blanca, la secretaria de Seguridad Nacional, Kristjen Nielsen, también atribuyó la decisión al aumento de aprehensiones en la frontera que destacó, el marzo aumentron 200%, respecto al mismo mes del año pasado, cuando se registró una caída inusual.
“Estamos en un punto de crisis y queremos acabar con ello antes de que aumenten más”, afirmó Nielsen.
Además, especificó que la Guardia Nacional apoyará a los agentes fronterizos en operaciones aéreas para detectar actividades ilegales, así como en labores mecánicas, como reparación de vehículos, y ofrecerá cuidados médicos a los inmigrantes que lo necesiten.
“Lo que haremos será liberar a los agentes fronterizos para que pueden hacer cumplir la ley”, indicó.
La Cancillería mexicana afirmó el miércoles en un comunicado que los militares de la Guardia Nacional “no portarán armas”, aunque ayer Nielsen rechazó confirmarlo y aseguró que “continúan las negociaciones” tanto con el Ejecutivo mexicano como con los estados fronterizos.
Nielsen conversó ayer con los gobernadores de los cuatro estados que hacen frontera con México (Texas, Arizona, California y Nuevo México), que tienen responsabilidad sobre la Guardia Nacional.
Los gobernadores republicanos de Texas, Arizona y Nuevo México ya han respaldado a Trump.
El único estado fronterizo que hasta ayer no se había posicionado era California, que por su tamaño y por su claro dominio demócrata se ha erigido en uno de los principales contrapesos a las políticas del presidente, especialmente en materia migratoria.
El despliegue de la Guardia Nacional es un paso positivo para proporcionar la seguridad que esta nación ha exigido desde hace mucho tiempo
Michael McCaul
Senador republicano por Texas
Esto es un insulto a nuestras tropas y dañará a nuestras Fuerzas Armadas como institución
Rubén Gallego
Senador demócrata por Arizona
JNO