Benito Cuenca Mayo, vocero de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, descartó que el obispo Salvador Rangel Mendoza haya pactado o concretado alguna negociación con un jefe del narcotráfico a fin de buscar la paz.
De acuerdo con la agencia Quadratín, Cuenca Mayo destacó que la intensión del cura sólo busca el diálogo en bien de las personas, por lo cual aseveró que no hay delito que se pueda tipificar al respecto.
En conferencia de prensa, aseguró que desde su toma de posesión en 2015, Rangel Mendoza ha convocado a ser artífices de paz, lo que lo ha llevado a tener acercamiento “con aquellas personas que provocan la violencia”.
“Dichos diálogos y acercamientos han sido de escucha y acompañamiento para dialogar con ellos y buscar poner una semillita de buena voluntad en la conciencia de estas personas para construir la paz con misericordia en la entidad tan lacerada por la violencia que vivimos diario”.
Aseguró que el sacerdote continuará con los diálogos en una actividad inmunentemente pastoral.
JMSJ