El éxito de la reforma educativa depende de la consistencia, la continuidad y energía en su instrumentación, sostuvo el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Otto Granados Roldán.
En la conferencia “La reforma educativa; logros y desafíos”, afirmó que aunque ya hay progresos relevantes, va a haber más resultados a mediano y a largo plazos, sobre todo en la calidad.
En la sede de la Unesco en París, Francia, Granados Roldán dio a conocer que más de 20 entidades de México tienen tasas de analfabetismo inferiores a 4.0 por ciento y como país, se está a centésimas de alcanzar una tasa libre de analfabetismo.
Explicó que se realizarán esfuerzos en el resto de los estados para bajar las tasas de analfabetismo, a fin de que el promedio nacional al final de la administración federal sea de 4.0 por ciento.
El funcionario federal dijo que mover un sistema educativo de este tipo requiere pensar en una nueva forma de gobierno en la que participen todas las esferas administrativas, el sistema nacional de evaluación, los padres de familia y las organizaciones de la sociedad civil.
Además, el Poder Legislativo, porque tiene en sus manos, entre otras cosas, la posibilidad de disponer de un presupuesto suficiente para la instrumentación de una reforma educativa a mediano y largo plazos.
Destacó que ahora se tiene un sistema educativo de derechos y obligaciones donde los maestros tienen la certidumbre de que pueden ingresar a la carrera docente a partir de un concurso de oposición y ascender por su propio esfuerzo y capacidad mostrada en los distintos procesos de evaluación.
Otto Granados se refirió a los procesos de evaluación, en los que han participado un millón 242 mil maestros, y estimó que al final de este gobierno se llegará a un millón 800 mil.
“Lo que estamos descubriendo o encontrando ahora es que naturalmente entre las nuevas generaciones de maestros que se están formando hoy, en las escuelas normales o en los institutos pedagógicos, ya perciben su propio futuro profesional de una manera distinta”, expresó.
Otto Granados señaló que el otro gran componente tiene que ver con el Nuevo Modelo Educativo, que se centra fundamentalmente en nuevas competencias y habilidades, y aprendizajes clave, que son de tipo curricular pero también de habilidades socioemocionales que le permitan al alumno ser competente en una disciplina e interactuar con su entorno más inmediato.
El Nuevo Modelo Educativo es, además, una construcción colectiva, con consultas a poco más de 300 mil participantes, entre maestros, especialistas, expertos y padres de familia, apuntó.
Refirió que este modelo empieza con nuevos planes y programas de estudio y con nuevos libros de texto en agosto próximo y es un esfuerzo realmente mayúsculo.
Subrayó además aspectos como las escuelas de tiempo completo, el programa para mejorar la infraestructura de las escuelas, y el plan para tener una mejor organización en los planteles.
Tras afirmar que todas las reformas educativas en el mundo siempre son controvertidas y polémicas, el funcionario resaltó la importancia de construir un ambiente de motivación y de consenso nacional en torno a esas transformaciones que faciliten su instrumentación.
ot