Durante 18 días, la Ciudad de México no tuvo oficialmente a alguien a cargo después de que se fue Miguel Ángel de Mancera. Ayer, el consenso entre los partidos políticos de la Asamblea Legislativa (ALDF), dio como resultado el nombramiento de José Ramón Amieva como nuevo jefe de Gobierno sustituto.
Amieva Gálvez llegó a la ALDF poco después de las 10:00 horas, se abrió paso entre un tumulto de gente que lo esperaba afuera del recinto de Donceles con porras a gritos y en cartulinas; y se reunió durante algunos minutos con un grupo de diputados, mientras en el pleno se preparaba su ingreso.
Al recinto se dieron cita integrantes del gabinete capitalino, diputados y dirigencias de partidos locales, todos en espera de que se aprobara el dictamen presentado por el presidente de la Comisión de Gobierno, Leonel Luna. Con 52 votos a favor y cero en contra, Amieva asumió el cargo.
A pesar de que contó con la aprobación de todas las fuerzas políticas, hubo legisladores que le advirtieron no le entregarían “un cheque en blanco”, pues le exigirán igual que al jefe de Gobierno anterior, a quien acusaron de no mostrar apertura al diálogo y de dejar múltiples pendientes.
En su toma de protesta, el mandatario declaró que a la CDMX se le ama y se le entrega porque ha sido generosa para todos.
Se describió como un hombre de instituciones con 23 años de experiencia como servidor público y, sobre todo, como un hombre de corazón y de convicciones.
En el contexto del período electoral, señaló que su Gobierno se mantendrá bajo el principio de neutralidad; pero con la garantía de que se ejercerán los derechos electorales de todos los habitantes, en un escenario de seguridad.
César Cravioto, coordinador de la bancada de Morena, mencionó que su voto de confianza fue primeramente porque el Gobierno local necesita una cabeza, y en segundo, porque Amieva cumple con el perfil.
Fernando Zárate, del Partido Verde Ecologista de México, aseveró que Mancera Espinosa se fue bajo el incumplimiento de la ley, debido a que no terminó su cargo de seis años y, además, dejó varios pendientes, principalmente en cuanto a la reconstrucción.
Sobre Amieva, destacó es un hombre que escucha a mayorías y a minorías y que ha aplicado la ley “sin amigos, sin cuates ni cuotas”.
Mauricio Toledo, del Partido de la Revolución Democrática, refrendó su compromiso con Amieva e hizo un exhorto para acelerar el proceso de reconstrucción de la capital.
Esta confianza se convierte para mí en una oportunidad, una oportunidad de poner mi conocimiento, mi empeño, pero sobre todo mi voluntad y mi corazón para corresponderles a ustedes y a todo el pueblo, a las y los habitantes de esta Ciudad de México, con todas mis fuerzas
José Ramón Amieva
Jefe de Gobierno
JNO