WASHINGTON.- Estados Unidos condenó hoy la “repugnante violencia política” y “represión” ejercida por la Policía y los “matones favorables al Gobierno” contra el pueblo de Nicaragua en las protestas de la última semana.
“Como nación que apoya la libertad de expresión como un derecho humano y civil, Estados Unidos condena la violencia y la represión propagada por el Gobierno de Nicaragua y cualquier cierre de medios”, indicó hoy la Casa Blanca en un comunicado.
Las protestas contra el Gobierno de Nicaragua, en las que han muerto al menos 28 personas, comenzaron hace siete días por la reforma de la Seguridad Social que planteaba el presiente Daniel Ortega (sobre la que ha dado marcha atrás).
Ahora han pasado a otro nivel y los manifestantes reclaman su salida, después de 11 años, con acusaciones de abuso de poder y corrupción.
“La repugnante violencia política de la policía y los matones afines al Gobierno contra el pueblo de Nicaragua, particularmente estudiantes universitarios, ha impactado a la comunidad democrática internacional”, indica la nota de la Casa Blanca.
“La Administración se une a la comunidad internacional en su llamada a un diálogo amplio y en su apoyo al pueblo de Nicaragua, que anhela la libertad política de expresión y las reformas verdaderamente democráticas que sobradamente merece”, agrega.
Estados Unidos ordenó ayer lunes a los familiares de los diplomáticos estadounidenses en Nicaragua que abandonen el país debido a esta crisis, y autorizó a los funcionarios que lo deseen a salir también de la nación centroamericana.
El pasado domingo, EU llamó a un “diálogo amplio” que incluya a todos los sectores de la sociedad para resolver el conflicto actual, restaurar el respeto por los derechos humanos y lograr un futuro “mejor y más democrático” para todos los nicaragüenses.
También pidió a Ortega que permita a los periodistas “operar libremente y restablecer toda la cobertura televisiva” e instó a los dirigentes nicaragüenses a realizar una investigación independiente y enjuiciar a los responsables de las muertes.
NCG