Foto: ESPECIAL HACEN EQUIPO. Los alumnos Luis Chacón Ochoa, Santiago Ley Flores, Jorge Fernández Hidalgo y el profesor Manuel Alcántara Juárez compitieron en China.  

El equipo integrado por estudiantes y un maestro de la Facultad de Ciencias de la UNAM logró el lugar 36 -de un total de 140 representativos de 51 países- en el Concurso Internacional de Programación Universitaria (CIPC por sus siglas en inglés), realizado en la Universidad de Pekín, en China.

El grupo PU++ (PUMAS en lenguaje de programación), que avanzó 70 posiciones respecto al año pasado en el mismo certamen, se ubicó en el tercer lugar de Latinoamérica y el primero entre los tres equipos de México.

En el concurso, a cada agrupación (de tres integrantes y un entrenador) se le asignó una computadora, sin conexión a Internet, para solucionar entre siete y 10 problemas con algoritmos creados en algún lenguaje de programación aceptado.
No se permite usar ningún dispositivo electrónico y gana quien resuelva el mayor número de problemas en el menor tiempo. Los jóvenes de la UNAM solucionaron cinco.

Conformado por los alumnos Luis Chacón Ochoa, Santiago Ley Flores, Jorge Fernández Hidalgo y el profesor Manuel Alcántara Juárez, el representativo se ubicó entre los mejores del mundo en dicha competencia.

Durante un año, los universitarios se prepararon para clasificar a las finales regionales y, posteriormente, a la final mundial. Fueron seleccionados de entre los integrantes del club de programación competitiva PU++, formado por estudiantes de la UNAM, y ya se está preparando el equipo que competirá en 2019.

La participación en concursos de programación permite mejorar el desempeño académico, incluso tener oportunidades laborales, pues los problemas a resolver son parecidos a los planteados en las empresas, de acuerdo a un comunicado de la UNAM.

Son los casos de Luis Chacón y Santiago Ley, estudiantes de Ciencias de la Computación, quienes tienen un contrato para laborar con Microsoft en Seattle. Mientras, Jorge Fernández, quien cursa Matemáticas, pretende dedicarse a la investigación en su área.

“Es relativamente nueva la participación de Latinoamérica en estas competencias en comparación con países de Europa del Este o Asia, en donde les enseñan a programar desde la primaria. Con nuestra presencia en la final mundial, contribuimos a que haya mayor interés de los alumnos en México y en nuestra universidad”, comentó Jorge Fernández.

 

 

 

JNO