FOTOS: Andree Jiménez/Especial Gali Fayad indicó que independientemente de a quién atribuir estos hechos es “preocupante” cuando las bandas delictivas “contaminan a funcionarios públicos”  

Luego de varios meses de enfrentamientos, un alza en la actividad del huachicoleo, ajuste de cuentas y la colocación de mantas supuestamente por parte del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la Fiscalía General del Estado (FGE) y el Ejército Mexicano realizaron un sorpresivo operativo mediante el que el gobierno del estado asumió el control de la seguridad en el municipio de San Martín Texmelucan.

 

En un hecho inédito en la historia reciente de la entidad, el gobernador del estado de Puebla, José Antonio Gali Fayad, asume por primera vez en su administración el control de la seguridad de un municipio, que será a través de la Dirección General de la Policía Estatal Preventiva, a cargo de Oscar López Sánchez, y en apego al artículo 115 constitucional.

 

En rueda de prensa, el gabinete de seguridad del estado confirmó que fueron detenidos 185 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad de San Martín Texmelucan, entre ellos el secretario Miguel Ángel Jacinto Fragoso y el director de Seguridad Municipal, Jerónimo Sinohé León Sánchez, quienes fueron sometidos a diferentes exámenes y pruebas para confirmar si se encuentran vinculados con el crimen organizado, principalmente con el robo de combustible y el CJNG.

 

No obstante, al cierre de esta edición, la SPP puso a disposición de la FGE a 119 personas, de los 185 detenidos, entre mandos y elementos operativos del municipio, entre quienes se encuentran Miguel Ángel Jacinto Fragoso, Jerónimo Sinohé León y Mauricio N.

 

Además, tres elementos municipales fueron hallados responsables de cobrar cinco mil pesos para que policías municipales no presentaran los exámenes de control de confianza.

 

A la par, la Fiscalía iniciará un proceso en contra de 113 personas por usurpación de funciones, pues fungían como parte de la corporación municipal sin ser policías.

 

Preservar la seguridad

 

El gobernador José Antonio Gali afirmó que la medida fue tomada con el fin de garantizar la seguridad de los pobladores de San Martín Texmelucan y forma parte de la estrategia para el combate al huachicoleo.

 

Mientras, el secretario General de Gobierno (SGG), Diódoro Carrasco Altamirano, precisó que esta medida será vigente “hasta que regrese el orden público”, que no deberá rebasar el 31 de diciembre de este año.

 

“Consideramos que las obligaciones no han sido cumplidas cabalmente por el Ayuntamiento de San Martín Texmelucan, las instituciones municipales han sido incapaces de garantizar el goce de los derechos fundamentales de las personas que se encuentran dentro del territorio”, señaló.

 

Recordó que el 3 de marzo fueron encontradas ocho bolsas con los cuerpos desmembrados de dos hombres y cartulinas firmadas por el CJNG en la calle Zaragoza del centro de San Martín; el 29 de ese mes fueron hallados los cuerpos de otros sujetos; el 20 de abril aparecieron restos humanos en la calle Independencia, así como mantas y mensajes de dicha célula criminal.

 

“Nadie por encima de la ley”

 

Gali Fayad indicó que independientemente de a quién atribuir estos hechos es “preocupante” cuando las bandas delictivas “contaminan a funcionarios públicos”. En ese sentido, dijo que si en las líneas de investigación se comprueba que mandos y policías están protegiendo a presuntos delincuentes, “serán castigados con todo el peso de la ley”.

 

“Todas las líneas de investigación están abiertas, en San Martín estamos viendo todas las cámaras de vigilancia para ver quién o quiénes son los que han venido tirando algunos cuerpos y ver si están operando esas cámaras o por alguna razón estaban apagadas, de igual forma todo aquel funcionario que, se presuma, esté coludido, será motivo de investigación”, afirmó.

 

Con ello recordó que los presidentes municipales de Atzitzintla y Palmar de Bravo han sido castigados por sus vínculos con el crimen organizado, por lo que, reiteró, se llegará hasta las últimas consecuencias.

 

Ante el proceso electoral, descartó que el operativo responda a un fin político, pues aseguró que la decisión se tomó por la cronología de hechos delictivos que se han presentado en la zona y la preocupación del no actuar de los policías municipales.

 

El operativo

 

La mañana de este miércoles, agentes de la Policía Estatal, de la FGE y del Ejército Mexicano tomaron las instalaciones de la Comisaría de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad de ese municipio para investigar a los elementos por su posible relación con el crimen organizado.

 

Alrededor de las 8:00 horas, al mando del titular de SSP, Jesús Morales Rodríguez, los efectivos ingresaron a la comandancia ubicada en bulevar San Damián, donde realizaron el retiro de armas y credenciales oficiales de uniformados y mandos policiacos.

 

Los 185 elementos que integran la corporación fueron trasladados a la Academia “Ignacio Zaragoza” para ser sometidos a pruebas de confianza, revisión del armamento, verificar que su Clave Única de Identificación Policial (CUIP) estaba vigente y si el personal que está dado de alta cumple con los requisitos que establece el Sistema Nacional de Seguridad Pública.

 

En caso de comprobarse algún vínculo con organizaciones criminales dedicadas al robo de hidrocarburo, todo el personal será detenido y judicializado.

 

Durante el operativo fueron localizados vehículos con reporte de robo de hidrocarburo, mismos que no habían sido notificados ante autoridades estatales o federales.

 

Respuesta del Ayuntamiento

 

Tras el operativo, el alcalde de San Martín Texmelucan, Rafael Núñez Ramírez, dijo que fue en respuesta “a los más de 50 oficios de auxilio” para solicitar la intervención de las autoridades estatales y federales para erradicar la violencia que prevalece en la zona.

 

Asimismo, aseguró que no meterá las manos al fuego por los elementos policiacos, no obstante dijo no tener motivos para dudar del comisario y director de la dependencia.

 

“Siempre hemos dicho que tenemos un problema, hemos dicho que San Martín huele a gas (…) Estos operativos lejos de perjudicarnos nos favorecen, nos van a dar una certidumbre de que nuestra policía esté limpia, si hay alguien metido en el crimen, que asuma las consecuencias”, apuntó.

 

fahl