El subsecretario de Industria y Comercio, Rogelio Garza Garza, descartó que el proceso electoral de México sea una presión para acelerar la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y tener un acuerdo en principio en las próximas semanas.
“Hemos sido claros. No vamos, por temas del proceso electoral o por alguna otra presión, a aceptar algo que no sea bueno para México”, argumentó el funcionario de la Secretaría de Economía (SE).
Luego de su participación en el foro “Cuarta Revolución Industrial”, organizado por la Universidad del Valle de México (UVM) campus Coyoacán, dijo que el equipo mexicano está más interesado en lograr un cierre de calidad que en darle prioridad al tiempo.
“Tenemos que sacar un tratado y, se firma bien, o no se firma”, enfatizó Garza Garza, quien apuntó que los negociadores mexicanos continúan con los trabajos para analizar los temas pendientes, como la regla de origen automotriz, de cara a la próxima reunión ministerial en Washington, D.C.
Cabe destacar que el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, comentó que las empresas y el Gobierno trabajan en una contraoferta del contenido regional, por lo que confió en que Estados Unidos flexibilice su postura.
Garza Garza puntualizó que en la renegociación entre México, Estados Unidos y Canadá, se sigue con buena perspectiva para lograr “muy pronto” un consenso en la actualización del tratado, vigente desde hace más de 24 años.
Por su parte, el Premio Nobel de Economía 2004, Finn Kydland, dijo que el comercio es un factor muy importante para el crecimiento de largo plazo de los países, por lo cual debe seguir la renegociación del TLCAN.
Durante su participación en el segundo y último día de actividades de la Cumbre Infonavit 2018, dijo que en estos momentos la economía y políticas de Estados se han vuelto impredecibles, por las acciones de su actual Administración.
Sin embargo, confió en que los tres países integrantes del TLCAN (México, Estados Unidos y Canadá), estén conscientes de la importancia del comercio en su crecimiento de largo plazo y por ello continúen la renegociación de este acuerdo comercial, vigente desde 1994.
Respecto al próximo proceso electoral federal en México, en el cual se elegirá al Presidente de la República, el también profesor de las universidades de Carnegie Mellon de Pittsburgh y de California, estimó que esta debe ser una oportunidad para intentar instaurar confianza en el futuro del país.
Sobre la respuesta que debería tener México ante la reforma fiscal de Estados Unidos, en la que destaca la reducción de la tasa corporativa de 35% a 21%, estimó que la economía mexicana no se quiere poner en una situación en donde las tasas fiscales son mayores a las estadounidenses.
“No logro concebir un escenario en donde podríamos aumentar las tarifas fiscales, en donde el presupuesto mexicano podría reducirse un poquito; solo sería eficiente si el cambio perseguido es un cambio a largo plazo”, añadió.
JNO