BARCELONA.- A pesar de jugar con uno menos durante todo el segundo tiempo, el Barcelona resistió los embates del Real Madrid (2-2) y prolongó durante una jornada más su condición de invicto en el campeonato en un clásico eléctrico, el último de Andrés Iniesta.
Sin que los puntos importaran por una vez, el partido estuvo presidido por la tensión en los últimos minutos del primer tiempo, con la expulsión de Sergi Roberto y otra que pudo ser de Gareth Bale, en la segunda el 2-1 de Messi vino precedido de una falta de Luis Suárez sobre Varane y también pareció penalti una entrada de Alba sobre Marcelo.
Más que puntos, lo que había en juego era el honor entre los dos equipos más grandes y ante esto, todo lo demás sobra. Empezó el Barça con mucha intensidad, muy energético, con mucha presión arriba frente a un Madrid que jugaba con mucho respeto.
Puso Ernesto Valverde a su equipo de gala, el que goleó al Sevilla en la final de Copa ofreciendo un fútbol de muchos quilates, y Zinedine Zidane no se dejó nada en la recámara a tantos días vista de la final de la ‘Champions’.
De salida controlaba el Barça, con mucha presión y buenas llegadas sobre la meta de Keylor Navas. De hecho, en el minuto 4 una asistencia de Messi a Luis Suárez obligó a intervenir a Varane en una gran acción ofensiva.
En la siguiente acción, tras una jugada en transición llegó el 1-0. Empezó la jugada Coutinho, intervino al primer toque Luis Suárez que habilitó a Sergi Roberto, el canterano recorrió la banda y centró al segundo palo, donde el uruguayo empalmó el balón sin dejarlo caer para abrir el partido en el minuto 10.
Pero en una jugada de indecisión de Busquets en el centro, el signo del partido cambió. Toni Kroos se adelantó al barcelonista, Cristiano Ronaldo habilitó de tacón al alemán y su centro al segundo palo permitió a Benzema dar una asistencia a Cristiano Ronaldo, que solo tuvo que empujar para empatar (1-1, min.15).
Al Barça le hizo mucho daño ese gol y prácticamente no se levantó durante todo el primer tiempo. El centro del campo del Real Madrid dominó la situación a partir de entonces, Marcelo campaba a sus anchas por la banda izquierda ante la falta de coberturas de Coutinho, mientras Benzema y un motivado Cristiano Ronaldo estaban muy presentes en ataque.
El portugués tuvo dos ocasiones claras en dos minutos. En la primera (min.27), Ter Stegen salvó prácticamente un uno contra uno ante Cristiano y en el siguiente minuto, CR7 remató demasiado cruzado.
No hubo más noticias del Barça prácticamente en el primer tiempo. El Madrid jugaba y los azulgranas estaban muy erráticos, pero apenas hubo más ocasiones, más allá de un remate de Benzema en el minuto 40 que salió fuera.
En los últimos minutos del primer tiempo, el partido se enredó con una serie de entradas, como una de Bale como Umtiti, hasta que en el tiempo añadido Sergi Roberto fue expulsado por una acción ante Marcelo, el Barça se quedó con diez y con 45 minutos por delante, el escenario ya era otro.
Movieron ficha los técnicos en el descanso. Valverde dejó fuera a Coutinho y puso a Semedo; Zidane dejó en el banquillo a Cristiano Ronaldo y entró Marco Asensio. El mallorquín en su primera acción, tuvo el 1-2, pero quien marcó fue el Barça.
En una pugna de Luis Suárez con Varane, que pareció falta del delantero uruguayo, el balón llegó a Messi, que firmó una gran acción individual y batió a Keylor Navas en el minuto 52 (2-1).
El Barcelona pescó ante el ritmo frenético que adquirió el partido en los primeros minutos del segundo tiempo. El Madrid, curiosamente, no se sentía bien jugando con uno más y los azulgranas, con uno menos, midieron cada una de sus salidas en ataque.
Iniesta jugó su trigésimo octavo clásico hasta el minuto 60, Valverde decidió darle aire a su equipo poniendo a Paulinho en juego y Zidane, ocho minutos más tarde, buscó la profundidad por el carril de Lucas Vázquez en lugar de Nacho.
El Barça jugaba mejor con diez que con once y el Real Madrid no se encontraba. Los azulgranas después del gol anotaron otro, anulado por fuera de juego previo de Rakitic, y Messi tuvo una muy clara ante Keylor Navas (min.70) que salvó el meta costarricense.
Pero en una acción esporádica, Asensio filtró un pase sobre Bale y el galés enganchó un tiro con rosca desde la frontal para empatar el partido en el minuto 72 y el duelo volvió a cambiar de color. De hecho, cuatro minutos más tarde Alba derribó a Marcelo dentro del área en una jugada que pareció penalti.
En los último diez minutos, el Madrid apretó y el Barça intentó defenderse con el balón. Al final el empate permite a los azulgranas continuar con su buena racha -42 partidos sin perder- y al Madrid de Zidane, salir de nuevo invicto del Camp Nou.
DPC