Foto: Cuartoscuro Córdova Vianello participó en el seminario “Democracia: una gramática contra las apariencias”, organizado por las universidades UNAM, la de Tlaxcala y el INE  

El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, aseguró que es fundamental reivindicar a los partidos políticos, tener elecciones libres, incluyentes e iguales, además de resarcir los derechos políticos y sociales.

La ruta a seguir en el ámbito de la democracia en México es “volver a lo básico”, pero no hay que caer en las falsas ilusiones, alertó al referirse a las nuevas propuestas para salvar a la democracia en el mundo.

“Hay tentaciones de que llegará la ‘e-democracy’ con las redes sociales, tan en boga, pero no hemos visto que algún país de la ‘primavera árabe’, por ejemplo, tenga democracia”, añadió.

Córdova Vianello participó en el seminario “Democracia: una gramática contra las apariencias”, organizado por las universidades Nacional Autónoma de México (UNAM), la de Tlaxcala y el Instituto Nacional Electoral (INE).

En su oportunidad, José Woldenberg, académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, indicó que actualmente hay dos finalidades entrelazadas en la competencia democrática: demeritar al adversario y aparecer como la encarnación de todas las buenas conductas políticas.

“Como bien escribió (Michelangelo) Bovero, ésa es una cara de la política, la otra tiene que ver con la necesidad de trascender el conflicto y hacer gobernable la vida pública, y eso lo entendieron los partidos más implantados luego de las elecciones del 2012, ya que ninguno contaba con los asientos suficientes en el Congreso. La aritmética democrática es contundente”.

Sin embargo, “seguimos evaluando a la colaboración como sinónimo de transa, y al acuerdo como algo indigno”, expuso en el encuentro realizado en el aula de seminarios Guillermo Floris Margadant, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.

A su vez, el filósofo italiano Michelangelo Bovero, académico de la Universidad de Turín consideró que el mundo está ante una “ekistocracia”, aunque la palabra no existe en los diccionarios, dijo,  está compuesta por “cracia”, que significa poder y “kakos”, un superlativo de malo o negativo.

“En nuestro uso común del lenguaje, malo o negativo puede tener dos interpretaciones, una más fuerte, más contundente, como ‘malo’, que se refiere a los malvados, a los que hacen daño; la otra es ‘negativo’, que significa ‘sin valor’, ‘despreciable’”, expresó.

El también politótologo consideró como un ejemplo de la clase política de la “ekistocracia” al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

 

JMSJ