DALLAS.- La organización internacional “Save The Children” dedicada a promover los derechos de los niños en el mundo, calificó hoy de inaceptable que el gobierno estadunidense esté separando a los niños de sus padres al detener a familias migrantes que cruzan la frontera desde México.
La organización, fundada en 1919, expresó su “profunda preocupación” por el tratamiento y el bienestar de los niños migrantes centroamericanos que están siendo detenidos por el gobierno de Estados Unidos después de cruzar la frontera desde México.
“Instamos encarecidamente al gobierno de los Estados Unidos a que evite la separación de los niños pequeños de sus padres siempre que sea posible y que limite la duración de dicha separación cuando ocurra”, señaló en una declaración, Carolyn Miles, presidenta y directora general de Save the Children.
“Separar a un niño de su familia innecesariamente es inhumano, traumático y, simplemente, inaceptable. La separación puede causar graves consecuencias sociales y emocionales negativas para los niños y sus familias en los días, meses y años venideros”, advirtió.
La presidenta de Save The Children pidió al gobierno de Estados Unidos brindar a los niños migrantes exámenes adecuados y un proceso judicial justo para garantizar que no sean devueltos a situaciones que pongan en peligro la vida.
La organización exhortó a las autoridades estadunidenses a mantener las disposiciones en las leyes existentes que establecen el debido proceso para los niños no acompañados y los niños separados de sus padres o tutores, de modo que aquellos con derecho a permanecer no sean injustamente tratados y se pierden en la confusión.
Save the Children recomendó al gobierno federal asegurarse de que los niños y sus familias conozcan sus protecciones y opciones legales en su lengua materna.
“Muchas de las familias y niños no acompañados que llegan a la frontera huyen de una compleja combinación de factores sociales y económicos, en particular la violencia en sus comunidades de origen y la búsqueda de asilo en Estados Unidos”, dijo Miles.
“Estados Unidos siempre ha sido un faro de esperanza, dando la bienvenida a la gente del mundo durante casi 250 años. Nuestro país debe seguir siendo un refugio seguro para tales niños y familias”, indicó.
“Para las familias y los niños no acompañados que buscan asilo, tenemos la obligación moral y legal de garantizar que los niños estén protegidos y se respeten sus derechos al debido proceso” expresó.
JACB