“A partir de esa derrota y cómo diría Jorge Borges, aprendí que en la victoria, todos somos arrogantes y nos la creemos, tengo que recordarle que en ese momento llegábamos con un récord de partidos ganados y 11 días atrás se le había ganado a ese mismo Chile 1-0 y yo equivocadamente pensé que era momento de jugar talento por talento. También tengo que decirle que en ese juego, me torturé pensando si era el partido para Hirving Lozano o Raúl Jiménez y hoy, dos años después, Hirving Lozano es un crack, entonces si lo miro en retrospectiva, tomé una buena decisión, no por el resultado, seguramente que no, pero aprendí igualmente de esa derrota.”
Una derrota que lo puso en duda de muchos, en boca de todos, pero que nadie imagína por lo que pasó el estratega colombiano. Fue así como se confieza: “Hemos sufrido, yo particularmente lo he llorado y lloré esa derrota. Entonces sí le he dado gracias al ser superior porque me ha dado la paciencia para aguantar, porque no ha sido fácil, pero es una experiencia que no cambiaría por ninguna otra.”
Fueron lagrimas que le abrieron los ojos y le ayudaron a entender “que el juego contra Chile fue un accidente y nos enseñó a todos, particularmente a mi que en cualquier día cualquiera le gana a uno y si puedo ir un poco más lejos, en cualquier día cualquiera lo puede golear a uno.” dijo Juan Carlos Osorio.
El segundo tropiezo del colombiano al mando del Tricolor fue Alemania, en la Copa Confederaciones 2017, fue menos abultado el marcador, 4 goles a uno, en el que la selección mexicana demostro sus armas después de ir abajo en el marcador, tras un mal inicio de jugo.
“Contra Alemania, siempre le hablé con mis jugadores de lo mismo, que para ese juego no estuvo ni Diego Reyes ni Carlos Salcedo y eso es una gran ventaja, para este juego no estuvo Néstor Araujo ni Diego Reyes, pero preparamos el juego con Hugo (Ayala), con Carlos (Salcedo), con Jesús (Gallardo), con Héctor (Herrera) y rematar el juego con Edson (Alvarez) y Rafael (Márques). Siempre y constantemente uno está aprendiendo.” Y es que para el técnico nacional, su legado con México es dejar una camada de jugadores jóvenes que representen de la mejor manera en un futuro al Tricolor, es decir, dejar un proceso exitoso.
“De la Copa Oro recuerdo que perdimos la semifinal contra Jamaica con dos oportunidades del “Cubo” Torres que no entraron en una pelota detenida y de ese grupo hoy y resultado de ese proceso puedo decirle con mucho orgullo que en nuestra selección mayor esta Jesús Gallardo, Erick Gutiérrez, Edson Álvarez y se consolidaron Jesús Corona y Hugo Ayala, si a eso le sumamos Néstor Araujo e Hirving Lozano, entonces yo creo que hemos hecho una buena gestión.”
Pese a todo, a las críticas, a las contadas derrotas, a todo aquello que le han achacado en contra, el colombiano asegura que ha sido un aprendizaje en conjunto.
“Estoy muy agradecido con México, con la Federación, con este grupo de jugadores por haberme dado esta gran oportunidad que yo creo que me está preparando para cualquiera otro reto futbolístico.”
DPC