Un equipo multidisciplinario de la Facultad de Química, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desarrolló un hidrogel para el tratamiento de las cicatrices, el cual es eficiente y también de bajo costo.
El nuevo producto acelera el proceso de cicatrización, también presenta una buena calidad en el cierre de los estratos internos de las heridas y previene la infección bacteriana.
Mediante un comunicado, la Máxima Casa de Estudios detalló que de las principales características de este producto, útil en quemaduras de primer y segundo grados, es que es termorreversible, es decir, a bajas temperaturas (menor a 13 grados centígrados) se encuentra en forma líquida y a temperatura corporal se vuelve gel.
Gerardo Leyva Gómez, investigador a cargo del proyecto, afirmó que la “gelificación” se puede emplear para crear reservorios dentro del cuerpo, que funcionan como sistemas de liberación prolongada de fármacos para tratamiento de padecimientos crónicos, y así evitar la administración frecuente de las dosis.
El hidrogel por sí mismo muestra un efecto terapéutico, por lo que no hay necesidad de añadir algún fármaco, pero podría ser utilizado también como excipiente para la administración de otros medicamentos; además, no provoca dolor y tiene un pH neutro.
El producto fue desarrollado a partir de un biopolímero natural extraído del exoesqueleto de algunos artrópodos -como el camarón, cangrejo y langostinos-, además de un polímero sintético, ampliamente usado en la industria farmacéutica.