El jefe de Estado de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, obtiene un 53 por ciento de apoyo con más del 90% de los votos escrutados en las elecciones presidenciales celebradas hoy, con lo que lograría la mayoría absoluta y no necesitaría una segunda vuelta, según informó la agencia semipública Anadolu.
La oposición, sin embargo, cuestionó el resultado del escrutinio de los votos, a su juicio manipulado, y asegura que Erdogan quedará al final por debajo del 50 por ciento, lo que haría necesaria una segunda vuelta el próximo 8 de julio.
“Tenemos los resultados no oficiales. Acorde a ellos, la nación me ha dado el mandato de presidente y de ser el jefe del Ejecutivo”, dijo Erdogan en un discurso transmitido en directo por la cadena NTV.
Erdogan subrayó que el mismo recuento también había arrojado una cómoda mayoría para la coalición Cumhur (Público), integrada por su partido islamista Justicia y Desarrollo (AKP), que gobierna Turquía desde 2002, y el derechista Movimiento de Acción Nacionalista (MHP).
La oposición primero pidió esperar hasta que la Comisión Electoral Suprema certificara el escrutinio del cien por cien de los votos, por sospechas de que haya sesgo en los resultados preliminares.
Pero poco después dio su brazo a torcer y el socialdemócrata Muharrem Ince, candidato del Partido Republicano del Pueblo (CHP), reconocía ante la cadena turca Fox TV el triunfo de su rival.
“Desde luego no era una competición justa, pero acepto que Erdogan ha ganado”, dijo Ince, que obtuvo un 30,7 por ciento de los votos.
El tercero en liza, con un 8,3 por ciento, es el candidato izquierdista Selahattin Demirtas, que lleva año y medio en prisión preventiva, seguido de Meral Aksener, antigua ministra del Interior, con un 7,4 por ciento.
La Plataforma Justicia Electoral -formada por el socialdemócrata Partido Republicano del Pueblo (CHP), el nacionalista Partido IYI y varias organizaciones cívicas-, que inicialmente difundía resultados diferentes a los de Anadolu, también acabó otorgando a Erdogan la mayoría absoluta, con un 52 por ciento.
A partir de ahora, Erdogan no solo será el jefe del Estado, sino también el del Gobierno, ya que con estos comicios entra plenamente en vigor la reforma constitucional de 2017, con la que se ha abolido la figura del primer ministro.
Ostenta así prácticamente todos los poderes en la República, dado que tiene, además, potestad de nombrar a gran parte de la cúpula de la Judicatura y puede incluso promulgar leyes por decreto, si bien el Parlamento tiene la posibilidad de anularlos.
El portavoz del AKP, Mahir Ünal, destacó que la participación en las urnas ha sido del 87 %, un nivel récord, si bien en la última década nunca había bajado del 80 por ciento.
Los resultados parciales de las elecciones parlamentarias, que se han celebrado hoy simultáneamente con las presidenciales, también dan una ventaja clara a la coalición formada por el AKP y el Movimiento de Acción Nacionalista (MHP).
Aunque el AKP, con un 42,5 % de los votos y 293 escaños, no llega a la mayoría absoluta, los 49 diputados de su socio de coalición le permitirían legislar con holgura en el Parlamento, de 600 asientos.
Por otra parte, el Partido Democrático de los Pueblos (HDP), izquierdista y prokurdo, ha superado el umbral electoral del 10 por ciento, alcanzando el 11,6 por ciento, y podrá contar con 67 escaños.
También la formación IYI, escindida del MHP el año pasado, ha superado este listón, y obtiene 44 diputados, aunque su presencia en el hemiciclo estaba asegurada, de todas formas, por haber formado alianza con el CHP.
La jornada transcurrió con relativa calma, aunque con algunos incidentes, como un enfrentamiento en un colegio electoral en la provincia de Erzurum, en el este de Anatolia, donde tres personas murieron en un tiroteo.
En la reyerta, ocurrida en el municipio de Karaçoban, perdieron la vida el jefe local del Partido IYI y otros dos ciudadanos, asegura el diario “Birgün”, si bien el periódico “Habertürk” achaca la pelea a un enfrentamiento entre familias enemistadas y habla de dos muertos.
Al inicio de la jornada electoral, el CHP denunció intentos de fraude en la provincia suroriental de Sanliurfa y la Comisión Electoral Suprema confirmó que se habían tomado “medidas administrativas y judiciales al respecto”.
NCG