FOTO: EFE VÍCTIMAS. La violencia generada durante las protestas contra el dictador Daniel Ortega ha afectado también a menores de edad.  

Demanda. Iglesia urge a Daniel Ortega adelantar las elecciones

MANAGUA.- La crisis sociopolítica que enfrenta Nicaragua desde hace mes y medio ha provocado la muerte de 17 menores de edad, entre ellos un bebé de año y medio de nacido que el fin de semana recibió un tiro en la cabeza, de acuerdo con organismos defensores de los derechos humanos.

El Movimiento Mundial por la Infancia (MMI) Capítulo Nicaragua, condenó ayer el “uso de la fuerza letal” del régimen de Daniel Ortega contra los niños en el conflicto local, que ha dejado, al menos, 218 muertos.

El MMI está conformado por Save the Children, Aldeas Infantiles SOS, Fundación Educación y Cooperación (Educo), Plan Internacional y World Vision.

“Condenamos rotundamente el uso de la fuerza letal contra la población civil, especialmente niñas, niños y adolescentes”, señaló el MMI Nicaragua, en un comunicado divulgado ayer.

Se trata del primer pronunciamiento del MMI desde que inició la represión en Nicaragua se cobró la vida del primer menor, el 19 de abril pasado, identificado como Álvaro Conrado, de 14 años, víctima de un disparo certero en la garganta, asestado, según los testigos, por un francotirador de la Policía Nacional.

En la víspera los organismos humanitarios reportaron al menos 6 personas muertas a manos de las fuerzas del Gobierno, entre ellas el bebé de 18 meses, cuya madre, Karina Navarrete, relató el sábado que caminaba por la calle junto a su familia cuando “comenzaron a rafaguearnos y el niño resultó herido”.

Denunció que el informe emitido por los forenses de Medicina Legal recoge que el bebé falleció a consecuencia de herida de arma blanca, algo que, dijo, es una estrategia para ocultar que su hijo fue alcanzado por una bala de los sandinistas.

El MMI exigió al Estado nicaragüense asumir su rol como garante de derechos con mayor cuidado y responsabilidad por tratarse de un niño, niña o adolescente, y debe además tomar medidas especiales fundamentadas en el principio del interés superior de la niñez.

También llamó a todos los sectores de la población nicaragüense y al Estado a “detener la violencia y garantizar la protección” de los menores.

También el fin de semana, el Episcopado de Nicaragua pidió a Ortega que acepte “formalmente” la propuesta de adelantar para marzo de 2019 las elecciones generales, para así facilitar el diálogo nacional que busca una salida a la crisis.

En una carta publicada el sábado, el Episcopado solicitó a Ortega que “comunique oficial y formalmente su aceptación de la propuesta que, recogiendo los sentimientos de la mayoría de los nicaragüenses, le presentamos el jueves 7 de junio”.

CRISIS
en NICARAGUA 

Días
50

Muertos
218