Utilidad.La herramienta permite medir la precipitación en tiempo real para reaccionar con mayor efectividad ante las lluvias fuertes
Instalado en una torre de 18 metros de altura y en plena cima del Cerro de la Estrella –a dos mil 400 metros sobre el nivel del mar–, el primer radar meteorológico de la Ciudad de México entra en operación este lunes 25 de junio.
Se trata de una herramienta de alta tecnología que permitirá observar y medir la precipitación en tiempo real en la CDMX y Zona Metropolitana, dijo a 24 HORAS Michel Rosengaus, consultor de Rossbach de México, SA, de CV (empresa encargada de vender este equipo al gobierno capitalino).
Para las autoridades del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), encargados de la adquisición y operación del radar, el escaneo en tiempo real de la atmósfera metropolitana les brindará información de fuertes precipitaciones o tormentas, y con ello reaccionar con más efectividad en las zonas vulnerables a inundaciones o encharcamientos y coordinar acciones con otras instancias del gobierno para proteger a la población.
“Este radar puede detectar la aproximación de tormentas hasta a una distancia de 120 kilómetros alrededor de su ubicación en el Cerro de la Estrella (en Iztapalapa), lo que cubre perfectamente hasta el parteaguas de la cuenca del Valle de México.
“Para una tormenta que ingresa desde el exterior del dominio del radar y avanza hacia la ciudad se pueden alcanzar anticipaciones de hasta dos horas. Para las tormentas que nacen ya directamente en la CDMX, el tiempo de anticipación alcanzable con respecto a la ocurrencia de los encharcamientos o inundaciones es de aproximadamente 30 minutos”, explicó.
Ramón Aguirre, director general del Sacmex, precisó que el radar brindará información sobre la carga de agua de las nubes, velocidad y trayectoria, cuyos datos serán recibidos en las oficinas centrales de este organismo.
“De hecho, en las oficinas centrales del Sacmex ya está el puesto de mando en donde se analiza todo tipo de información meteorológica, y ahora con nuestro radar se intensificarán las tareas con mayor precisión”, comentó el personal técnico de ese organismo de gobierno.
El radar (de tecnología estadounidense) tuvo un costo de 25 millones de pesos, estará fijo, su operación es automática y la antena girará a 360 grados para tener un monitoreo óptimo de la atmósfera metropolitana.
Antes de que el Sacmex y los expertos de la empresa Rossbach de México decidieran instalar el equipo en el Cerro de la Estrella (a corta distancia de la pirámide y a la misma altura de ésta), primero recorrieron zonas altas de la ciudad como Contadero y Santa Fe, en Cuajimalpa, pero encontraron que había muchos obstáculos físicos como edificios y torres, y cuando visitaron el último punto determinaron que estratégicamente era el mejor sitio por su altura y visión.
“La ubicación del radar en el Cerro de la Estrella es muy afortunada, tiene una ubicación al centro de la zona urbana y de una altitud tal que permite al radar observar por arriba de los edificios más altos y al mismo tiempo suficientemente cerca del suelo para medir fidedignamente la intensidad de la lluvia. Esta ubicación elimina el problema tradicional de instalaciones similares en zonas urbanas, el bloqueo de la visibilidad del radar por los edificios circundantes y minimiza los ecos falsos que estas estructuras pueden producir en los productos del equipo”, detalló Rosengaus.
La instalación de la torre y el radar contaron con las autorizaciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por la zona arqueológica; y de la Semarnat, por tratarse de un parque nacional.
“No se taló ni se podó ni un árbol; todo se hizo en coordinación perfecta con las autoridades federales y locales”, enfatizó uno de los trabajadores que montó la torre del radar.
Xavier Rodríguez