Denuncia. Habitantes de Atizapán aseguran que la construcción de la obra ya estaba presupuestada por la administración anterior
Habitantes de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, solicitaron a la presidenta municipal con licencia, Ana Balderas, quien busca reelegirse el próximo domingo, informe en qué se invirtieron 26 millones de pesos que supuestamente irían a parar a la construcción de la macrocelda ocho del relleno sanitario denominado Puerto de Chivos, construido en un terreno propiedad de la comunidad agraria de ese municipio.
Los vecinos aseguraron que la actual candidata de la coalición Por el Estado de México al Frente (PAN, PRD y MC) hizo una inversión millonaria en un terreno propiedad de la comunidad agraria para la construcción de una obra que, afirmaron, ya había sido presupuestada en la anterior administración de Pedro Rodríguez.
Por lo que “es necesario que Ana Balderas aclare en qué fueron invertidos esos 26 millones de pesos”, señalaron integrantes de la comunidad agraria de Atizapán de Zaragoza.
De acuerdo con los vecinos, quienes han presentado diversas denuncias sobre el tema, el terreno en el que fue construido el relleno traería como beneficio “comprar energía eléctrica con un costo menor a la empresa Energreen, 20% menos con referencia al precio de la CFE”.
Además, integrantes de la comunidad informaron que hace algunos años los tribunales agrarios confirmaron que terrenos donde se ubica el relleno sanitario les pertenecían a ellos y no a los gobiernos estatal o municipal.
En documentos consultados por 24 HORAS, los habitantes piden al Ayuntamiento una explicación sobre cuándo se dio cumplimento a la sentencia emitida por el Tribunal agrario “para la entrega real, formal y material de los terrenos que comprenden la poligonal de los predios de la comunidad agraria”.
Los vecinos explicaron que permitieron la creación de la macrocelda a cambio de beneficios para los 51 comuneros de ese municipio, a pesar de que no se establecían los acuerdos concretos con el ayuntamiento.
También señalaron que este predio fue utilizado por la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), quien era la encargada de hacer investigaciones y explotar el gas que desprende el relleno; ante lo cual el municipio estaba comprometido a repartir las regalías de dicha explotación a partes iguales con esa casa de estudios.