La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos sufre un alto índice de deserción de sus agentes, lo que esta impidiendo las metas de crecimiento fijadas para esta corporación por la administración del presidente Donald Trump, de acuerdo con un reciente informe gubernamental.
En la primera semana tras su toma de posesión, el presidente Donald Trump ordenó al Departamento de Seguridad Nacional incrementar en cinco mil el número de agentes de la Patrulla Fronteriza.
Sin embargo, en vez de aumentar el número la Patrulla Fronteriza los ha estado perdiendo. En 2017 registró una pérdida neta de casi 400 agentes.
Un informe emitido la semana pasada por la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO), el brazo investigativo del Congreso de Estados Unidos, reveló que la deserción de los agentes fronterizos ha superado los números de contratación.
Esto a pesar de que la Patrulla Fronteriza más que duplicó su presupuesto destinado a las labores de reclutamiento, para pasar de 432 mil 775 dólares en el año fiscal 2015 a un millón 19 mil dólares en 2017.
El informe de la GAO destacó que los esfuerzos de reclutamiento fueron efectivos. Las aplicaciones aumentaron y el entrenamiento se aceleró.
Las mejoras redujeron los tiempos de contratación, de 628 días a 274 días. En la primera mitad de 2018, la Patrulla Fronteriza contrató a casi el doble de agentes que reclutó en el mismo período en 2017.
Pero no fue suficiente para mantenerse al día con el número de agentes que abandonan la corporación. En 2017, la Patrulla Fronteriza registró una pérdida neta de casi 400 agentes.
Al final del año fiscal 2017, la corporación tenia unos 18 mil agentes, siete mil menos que la meta de 25 mil fijada por el presidente Trump.
Funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), la agencia bajo la que opera la Patrulla Fronteriza destacan que la deserción es provocada por el bajo salario (52 mil 583 dólares en el primer año) y los despliegues en ubicaciones remotas e indeseables.
De acuerdo con el estudio de la GAO, las oportunidades de empleo en la iniciativa privada y en otras ramas del gobierno federal representan una fuerte competencia para retener a los agentes. El año pasado, el 39 por ciento de los agentes de la Patrulla Fronteriza que dejaron el trabajo se fueron a otra agencia federal.
Los representantes (diputados) federales por Texas, el republicano Will Hurd y el demócrata, Filemón Vela, presentaron en mayo pasado una iniciativa de ley para facilitar a los agentes de la Patrulla Fronteriza el cobrar horas extras.
Vela y otro demócrata de Texas, el representante Henry Cuellar de Laredo, impulsaron también el año pasado una iniciativa de ley que habría facilitado a la CBP contratar a veteranos de las corporaciones de policía y militares permitiéndoles renunciar al requisito de pasar una prueba de polígrafo.
Cuellar dijo que la medida ayudaría a abordar la escasez de personal al evitar las pruebas “laboriosas”, “propensas a fallas” y “redundantes”. El proyecto de ley pasó en la Cámara, pero se freno en el Senado.
NCG