Dámaso López Núñez, el Licenciado, considerado como el sucesor de Joaquín el Chapo Guzmán al frente del Cártel de Sinaloa, compareció ayer ante una corte federal de Estados Unidos, luego de ser extraditado el viernes pasado.
Ahí, la corte del distrito este de Virginia decretó que el Licenciado debe seguir bajo custodia de los alguaciles en una prisión federal hasta la siguiente audiencia, en la que se espera que se declare culpable o inocente del cargo de tráfico de cocaína.
Las autoridades americanas lo señalan de conspirar para traficar cocaína entre 2003 y 2016; de ser hallado culpable, el gobierno de EU buscará una sentencia de entre 10 años de prisión y cadena perpetua, así como el pago de una multa de diez millones de dólares.
Durante la audiencia, el juez le informó a López que la razón de su comparecencia es una acusación por tráfico de cocaína, que tenía derecho a guardar silencio y tener una defensa de oficio en caso de no poder pagar un abogado.
El Licenciado pasó de ser compadre del Chapo a convertirse en su enemigo y será pieza clave de la fiscalía en el juicio contra Guzmán Loera, que iniciará en septiembre en Nueva York.
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