Las cosas para el grupo de Ricardo Anaya en el Partido Acción Nacional no van nada bien; al interior del partido la exigencia por una pronta renovación de la dirigencia cada vez es mayor. Más grupos exigen claridad en el proceso y también piden sanciones directas contra quienes son los responsables de los malos resultados en las elecciones pasadas.
Estas agrupaciones aseguran que Damián Zepeda y el grupo de Ricardo Anaya continúan sin dejar claro el rumbo del partido o de la llamada alianza con el PRD y Movimiento Ciudadano, misma que para muchos ya no tiene razón de ser, pese a que el grupo de Ricardo Anaya asegura que sin ellos los resultados hubiesen sido peores.
Pero las malas noticias no dejan de llegar a este grupo, pues tan sólo ayer la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que la expulsión de Eufrosina Cruz Mendoza, Ernesto Javier Cordero Arroyo y Jorge Luis Lavalle Maury no era tan sencilla.
En sesión, los magistrados consideraron que los tres militantes panistas expulsados debían ser escuchados en una primera instancia, por el órgano interno de este instituto político, pues el proceso de expulsión no fue transparente ni el adecuado.
Justo una semana después de la elección, la Comisión de Orden y Disciplina Intrapartidista del Consejo Nacional del PAN determinó expulsarlos por considerar que apoyaron la candidatura de José Antonio Meade y no la del candidato panista.
Sin embargo, Eufrosina Cruz Mendoza, Ernesto Javier Cordero Arroyo y Jorge Luis Lavalle interpusieron una queja ante el tribunal que fue atendida rápidamente. Los militantes panistas estimaron ilegal la expulsión, pues consideraron que la comisión nunca les informó del proceso y no les permitió derecho de audiencia.
A juicio de los panistas expulsados, el órgano partidista responsable no tenía competencia para instruir el procedimiento sancionatorio; en su desarrollo se violó el principio de taxatividad de las normas por las cuales se le sancionó, y se vulneraron en su perjuicio los derechos de libertad de expresión, voto y no discriminación, ya que se le juzgó por haberse expresado en contra del dirigente nacional con licencia del Partido Acción Nacional y manifestar que el sentido de su voto no sería a favor de Ricardo Anaya Cortés.
De tal forma, la sala superior del tribunal determinó que lo procedente es reencauzar el medio de impugnación a la Comisión de Justicia del Partido Acción Nacional, para que, en un plazo razonable, resuelva lo que en Derecho corresponda. De esta manera, los magistrados ordenaron que sea esta instancia la que los reciba y realice el proceso conforme a derecho.
Lo cual pondrá en jaque al grupo de Anaya, pues parte de las exigencias es que antes de hacer cualquier movimiento, se deje en claro el procedimiento de la nueva dirigencia del partido.
Pero además de esto se sabe que en los próximos días vendrán otras malas noticias para Ricardo Anaya, pues el caso en la PGR aún no está cerrado, y parece que al ya no ser candidato podrían al menos citarlo a comparecer ante el agente del Ministerio Público federal como indiciado en el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.