El secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, destacó hoy que su Gobierno y México se han comprometido a trabajar de “manera estrecha” en asuntos comerciales, de seguridad y frontera, tras una reunión en la que se reafirmó que los dos países son “vecinos, socios y amigos”.
“México es un socio regional y mundial y como ejemplo podemos trabajar con El Salvador, Guatemala y Honduras para reducir la inseguridad y violencia, y así mejorar las oportunidades económicas y luchar en contra de la corrupción”, dijo Pompeo en un breve mensaje a medios en la sede de Cancillería.
Explicó que así se podrá “reducir la migración que socava la seguridad en Estados Unidos y México”.
Una comitiva encabezada por Pompeo visitó este viernes México para reunirse con el actual presidente, Enrique Peña Nieto, y el electo mandatario, Andrés Manuel López Obrador, en el que supone el primer acercamiento cara a cara del líder izquierdista con el Gobierno de Estados Unidos.
El Gobierno de Donald Trump “va a seguir trabajando de forma muy estrecha con el presidente Peña Nieto en una gran cantidad de temas comunes como las relaciones comerciales, la seguridad, la frontera y diferentes temas que afectan ambos países”, dijo Pompeo en este mensaje a medios junto con el canciller mexicano, Luis Videgaray.
Pompeo indicó que Estados Unidos está “comprometido” en avanzar en la seguridad en ambos lados de la frontera y luchar para “desarticular” las organizaciones delictivas que trafican con drogas, armas y personas.
“Son responsables de producir la violencia y debemos detenerlos en ambos países”, agregó.
Reconoció que la demanda de droga se da principalmente en Estados Unidos y “destruye” comunidades, y por ello Trump quiere luchar contra el tráfico dentro y fuera de sus fronteras para que “ambos países estén más seguros”.
También aseguró que Estados Unidos buscará actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para “apoyar” a los trabajadores estadounidenses, un objetivo “clave” para Trump.
Además, felicitó al país por las elecciones presidenciales del pasado 1 de julio, que calificó de “históricas” porque demostraron “el compromiso de México con la democracia”.
Aseveró que el Gobierno estadounidense espera trabajar con López Obrador después de que asuma el cargo el 1 de diciembre.
Junto con Pompeo viajaron el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin; la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, y el yerno y asesor del presidente, Jared Kushner.
En su turno de palabra, el canciller mexicano destacó que la reunión de hoy entre altos funcionarios de ambos Ejecutivos fue de “gran respeto” y trabajaron para “fortalecer la relación de amistad entre ambos países”.
Explicó que en la residencia oficial de Los Pinos, el presidente Peña Nieto habló con Pompeo sobre el TLCAN y la necesidad de éxito en la renegociación.
El mandatario le reiteró la “gran preocupación” de México por la política migratoria de separar a niños migrantes de sus familias.
“En general, la reunión fue constructiva y útil para seguir avanzando en temas de la relación bilateral”, agregó Videgaray.
Finalmente, explicó que en el periodo de transición entre Gobiernos mexicanos se trabajará como “un solo frente común” por el bien de México.
Sobre las 15.15 hora local (20.15 GMT), Videgaray recibió en la sede de Cancillería a su homólogo Pompeo y a Jared Kushner, con quien sostuvo un encuentro de trabajo para hablar de migración, seguridad y comercio, según informó la Secretaría de Relaciones Exteriores.