El cambio de nombre
Tras el tsunami morenista en la elección del 1 de julio, ya se puso de moda anunciar replanteamientos de las plataformas políticas y se desataron sendos forcejeos internos por encabezar la renovación de los respectivos organismos, algunos incluso en grave riesgo de desaparecer. En el caso del PRD, por ejemplo, resulta que la corriente interna denominada Galileos ha pedido que los Chuchos, principales impulsores del Frente, se hagan a un lado para que el movimiento dirigido por Guadalupe Acosta Naranjo tome las riendas de lo que queda del sol azteca. Entre las propuestas que impulsa la mencionada tribu se encuentra, nos aseguran, un inminente cambio de nombre al instituto político. ¿Será?
Los ven como dirigentes
Otro de los nombres que empiezan a sonar fuerte entre los panistas que aún sobreviven es el de Marko Cortés, quien al parecer suma simpatías al interior del partido y pudiera ser una de las cartas fuertes de los blanquiazules para recomponer las ruinas del PAN. Como mencionamos anteriormente, también suena Miguel Márquez Márquez, actual gobernador de Guanajuato. No cabe duda que hay aspirantes de peso y de que el proceso de selección se pondrá interesante. Quien se anime a agarrar al toro por los cuernos tendrá la tarea titánica de construir nuevamente cimientos fuertes tras las ruinas que dejó el grupo de Ricardo Anaya y Damián Zepeda. ¿Será?
Un Tribunal igualitario
El año pasado, el Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de México, a cargo de la magistrada Myrna Araceli García, se sumó a la Ley General para la Igualdad entre Hombres y Mujeres, y, nos dicen, hoy en día se puede jactar en ser el primer órgano jurisdiccional de México en adoptarla. Hay que ver que de los 273 servidores públicos que laboran, casi 60% son mujeres, ya sea para desempeñar actividades jurisdiccionales o administrativas, además de que más de la mitad de los magistrados son de sexo femenino. Parece que es un ejemplo de una instancia con equidad de género. ¿Será?
Apuntado, y sin perfil
Mientras las mesas de trabajo de transición avanzan en la CDMX, en el tema de agua participa Jorge Arganis Díaz Leal, ex secretario de Obras en el gobierno de Marcelo Ebrard -quien, por cierto, renunció a los tres años de estar en el cargo por diferencias con Ebrard, se dice, por las obras de la Línea 12 del Metro-. Tras la renuncia, Arganis fue rescatado por Andrés Manuel López, y éste lo puso como asesor del Metro; es decir, por más de ocho años el ex funcionario estuvo flotando como asesor, pero ahora se comenta que Arganis trae doble juego, pues tanto puede ser el próximo director del Sistema de Aguas de la CDMX como el titular de la Conagua. Quienes conocen de estos temas aseguran que el ingeniero sabe de construcciones (con amplia trayectoria en ICA) y de Pemex (donde también trabajó), pero de agua no cumple con el perfil, se asegura. ¿Será?