MASAYA.-Cientos de efectivos de las “fuerzas combinadas” del Gobierno de Nicaragua celebraron hoy, con vítores y música, la toma de control de Masaya, donde ayer martes derribaron las barricadas y borraron pintadas con frases contra el presidente del país, Daniel Ortega.

 

Efectivos de la Policía Nacional, parapolicías, paramilitares y antimotines llevaron a cabo en Masaya la llamada “Operación Limpieza“, que consistió en derribar los “tranques” que seguían levantados y eliminar cualquier resto que recordase que el pueblo se declaró “territorio libre del dictador”, en referencia a Ortega.

 

El operativo policial, que se llevó a cabo de forma violenta por parte de las fuerzas estatales hacia la población, se saldó con tres personas fallecidas el martes en la localidad.

 

Un policía, un joven de 15 años y una mujer que estaba en la acera de su casa fueron asesinados con armas de fuego en el transcurso de la denominada “Operación Limpieza” en Masaya, según la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).

 

Este miércoles, el barrio masaya de Monimbó, de tradición indígena, amaneció atestado de miembros de las “fuerzas combinadas”, quienes aseguraron que “ha vuelto la paz y la tranquilidad” para los pobladores. afirmación que contrasta con la escena del entierro de un joven de 15 años asesinado en la refriega de ayer.

 

Una tía del fallecido, quien rehusó brindar su identidad, dijo a Efe que la aparente calma que se respira en Masaya es “falsa”, pero “la gente tiene miedo a salir”, debido a la fuerte presencia de miembros de las “fuerzas combinadas”.

 

La familia del joven aseguró que “si no hubiera miedo”, en el funeral de Eric Antonio Jiménez López, al que apenas asistieron tres decenas de personas, “estaría lleno de gente”, pero debido a la presencia policial, los masayas optaron por no salir de sus casas.

 

La mujer pidió el cese a la represión y el apoyo “de otros países” para que la crisis sociopolítica que vive el país centroamericano desde hace tres meses concluya y se recupere la paz, la libertad y la democracia.

 

Las protestas contra Ortega se iniciaron el 18 de abril, por unas fallidas reformas a la seguridad social y se convirtieron en un reclamo que pide la renuncia del mandatario, después de once años en el poder, con acusaciones de abuso y corrupción en su contra.

 

No obstante, algunos ciudadanos de Masaya, ante la presencia policial, defienden al Gobierno y celebran que las “fuerzas combinadas” hayan tomado el control de la zona.

 

Carmen Velázquez González dijo a Efe que se siente “agradecida” por la labor que realizaron en el pueblo las “fuerzas combinadas” y por su presencia permanente desde el pasado lunes.

 

“Estábamos atrincherados y estábamos con temor hasta de salir a trabajar y gracias a Dios ya estamos liberados, aunque fue duro, pero ya estamos alegres, ya vamos a salir con libertad a la calle”, explicó Velázquez, quien se mostró en contra de las protestas populares y a favor del Gobierno de Ortega.

 

Velázquez, quien lamentó la muerte de las más de 350 personas que fueron asesinadas desde el comienzo de las revueltas “porque todos somos humanos”, señaló que “la bala viene desperdigada y uno se tiene que salvar su pellejo”, por lo que evitó culpar a los efectivos gubernamentales de los asesinatos.

DPC