Bankok.- La mayoría de los Jabalies Salvajes, el equipo de futbol infantil que pasó dos semanas atrapado en una cueva de Tailandia, comenzaron con las ceremonias para ordenarse como monjes budistas y cumplir una promesa que hicieron sus familias.
A primera hora del martes, el grupo acudió al templo Phra That Doi Wao, en provincia de Chiang Rai, donde realizaron, retos, ofrendas espirituales y ritos de purificación, que incluyen afeitar el pelo de los futuros monjes
En esa condición estarán nueve días en un monasterio junto con su entrenador, quien ya es monje, en una tradición para quienes experimentan la adversidad.
La permanencia en el monasterio es una limpieza espiritual, es como morir para renacer, explicó a la prensa el padre de uno de los pequeños.
Todo el proceso durará nueve días, un número de suerte en Tailandia, precisó la BBC.
Las familias de los rescatados prometieron que los niños entrarían en el monacato una vez fueran rescatados para agradecer su regreso y en honor al buzo voluntario fallecido, Samar Kunan.
De la ceremonia sólo quedó excluido uno de los niños rescatados, Adul Sam-on, quien pertenece a una minoría étnica cristiana procedente de la vecina Birmania.
Las operaciones de salvamento para los chicos, de entre 11 y 17 años, y su entrenador, de 26,
levantaron una gran expectación en todo el mundo y sirven de orgullo nacional en el país.