Los Ángeles.- Cerca de una veintena de incendios en California, los más graves localizados cerca del Parque Nacional de Yosemite -que permanece parcialmente cerrado al público-, han dejado ya ocho muertos y han arrasado más de 93 mil hectáreas de terreno, informaron ayer las autoridades.
“Extrema no es la palabra que se ajusta para describir esta situación, es mucho más que eso”, dijo a la cadena NBC el jefe de división del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire), Chris Anthony.
El incendio Carr, ubicado en el condado de Shasta (a unos 400 kilómetros al norte de San Francisco) y originado hace una semana cerca de la localidad de Redding (con 92 mil habitantes), es el más mortífero de todos, ya que en él han fallecido seis personas, entre ellas una mujer de 70 años y dos de sus bisnietos, con edades de 5 y 4 años.
Carr, el foco más peligroso, ha consumido más de 40 mil hectáreas de terreno y destruido 723 edificios residenciales. Está contenido en un 20 % y hay siete personas desaparecidas, según datos facilitados por Cal Fire.
El alguacil del condado de Shasta, Tom Bosenko, explicó que una víctima de ese incendio hizo caso omiso de las notificaciones sobre la necesidad de evacuar la zona.
El Servicio Meteorológico Nacional de EU señaló que el “calor excesivo actual, combinado con una baja humedad relativa y la presencia de ramas y hierba seca, está causando numerosos incendios que presentan un explosivo crecimiento de fuego”.
LEG