Ante la ola de violencia que se registra en la zona norte de la República Mexicana, empresas del sector privado han optado por resguardar sus inmuebles y camiones de trasporte de carga con elementos de seguridad privada, cuyas contrataciones van en aumento.
De acuerdo a la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (Amesp), de enero a julio del año en curso, las contrataciones de guardias de seguridad han aumentado 10% en las entidades del norte y del bajío del país, en comparación con el mismo período de 2016.
El organismo detalló que la solicitud de más vigilancia se debe principalmente a los altos índices de inseguridad que presentan las entidades del norte, donde el robo de camiones carga es uno de los objetivos principales del crimen organizado.
El último informe de la Amesp registró un aumento de 300% en el robo de camiones de carga y tráileres, de enero a octubre del año pasado, donde documentó mil 124 asaltos a ese tipo de vehículos, mientras que en el mismo período de 2016, se contabilizaron 375.
Ante esta situación, algunas de las modalidades de seguridad privada más requeridas son el resguardo de camiones de carga, así como los guardias intramuros, cuya labor es mantener seguros los inmuebles de las empresas que los contratan.
En una entrevista con 24 HORAS, Adrián Domínguez, integrante del Comité Ejecutivo Nacional de la Amesp, que agrupa a 33 empresas de seguridad privada en México, aseguró que el aumento en la demanda del servicio también se debe a que a lo largo de los años ha prevalecido la eficacia de los guardias ante quienes los contratan.
Detalló que estos aspectos son desarrollados en la capacitación que reciben las personas que se emplean en este ramo, misma donde se fomenta el desarrollo de los valores de los guardias.
Esta estrategia implementada en el desarrollo de un elemento de seguridad, afirmó Domínguez, es la que inhibe que éstos se coludan con los grupos criminales que tienen como objetivo los inmuebles o camiones que se resguardan en el norte del país, donde hay presencia de al menos tres organizaciones delictivas que son objetivos primordiales de las autoridades federales.
LEG