La ex presidenta de Chile Michelle Bachelet será la próxima jefa del área de Derechos Humanos de la ONU, un cargo considerado como uno de los más complejos del mundo y objeto habitual de críticas y presiones de los Gobiernos.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, propuso ayer a Bachelet para reemplazar al príncipe jordano Zeid Raad al-Hussein, quien declinó buscar un segundo periodo como Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Tras consultar a los grupos regionales, Guterres trasladó ayer su decisión a la Asamblea General, que debe dar su visto bueno al nombramiento. Para ello, el presidente de ese órgano, Miroslav Lajcak, convocó a una sesión plenaria para el viernes próximo a las 10.00 hora de Nueva York , según una carta publicada por su oficina.
El proceso es tradicionalmente un mero trámite y es habitual que la propuesta del secretario general sea aceptada por aclamación de los Estados miembros, sin necesidad de un voto.
Una vez confirmada, Bachelet se pondrá al frente de la gran maquinaria de derechos humanos de la ONU, con sede principal en la ciudad suiza de Ginebra.
El actual alto comisionado se ha distinguido durante su mandato por mostrarse muy duro con Gobiernos y líderes que a su juicio violan los derechos de sus ciudadanos.
Zeid ha sido un duro crítico del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela y más recientemente de la dictadura de Daniel Ortega de Nicaragua.
También ha cuestionado los Gobierno del Presidente de EU, Donald Trump y de países como Hungría, China, Rusia o Corea del Norte; así como a los dirigentes europeos que utilizan un discurso xenófobo con los inmigrantes.
Ese tono beligerante le costó fuertes ataques por parte de numerosos Estados, con algunos como Hungría pidiendo abiertamente su dimisión, y con líderes como el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, lanzando insultos en su contra.
La ONG Human Rights Watch (HRW) destacó ayer que, de ser confirmada, Bachelet asumirá “uno de los trabajos más difíciles del mundo en un momento en el que los derechos humanos están bajo ataque”.
En un comunicado, el director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth, destacó que la expresidenta chilena tiene “una perspectiva única” sobre la importancia de una fuerte defensa de los derechos humanos, dado que ella misma fue víctima de torturas durante la dictadura de Augusto Pinochet.
La Asociación de Naciones Unidas-Reino Unido, una ONG británica que promueve la labor de la ONU, consideró por su parte que Bachelet sería una “elección sólida” para el puesto, destacando su experiencia en la organización y su trabajo con la sociedad civil.
México felicitó a Bachelet por su nominación.
LEG