El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se reunió hoy con el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, que llegó a Israel para una breve visita oficial en la que tratará cuestiones como la seguridad regional o la presencia iraní en Siria.
El jefe de Gobierno recibió a Bolton en su residencia oficial de Jerusalén, en una cena en la que también asistieron el embajador estadounidense en Israel, David Friedman, así como su homólogo israelí en Estados Unidos, Ron Dermer, informó la oficina de prensa gubernamental en un comunicado.
Netanyahu consideró a Bolton como “un gran amigo de Israel” y “un gran promotor de la alianza estadounidense-israelí”, y añadió que recibirle en el país en el momento actual era “particularmente importante” por “las decisiones trascendentales” del presidente estadounidense, Donald Trump, de trasladar la embajada de Estados Unidos a Jerusalén y “salir del terrible acuerdo con Irán”.
El mandatario agregó que espera tratar “una gran variedad de temas” con el asesor de seguridad nacional estadounidense, con el que se reunirá de nuevo mañana, y aseguró, “el más importante es cómo seguir haciendo retroceder la agresión de Irán en la región” y evitar “que nunca tenga armas nucleares”.
El oficial estadounidense agradeció las palabras de Netanyahu y consideró que Israel, Estados Unidos y “todo el mundo” tienen “grandes desafíos” con los que lidiar, con “el programa de armas nucleares de Irán” o “los programas de misiles balísticos al principio de la lista”.
Durante la jornada de hoy, Bolton declaró en una entrevista para la televisión australiana ABC News en Jerusalén que “el objetivo de Estados Unidos, Israel”, e incluso Rusia, es dejar a Irán y a sus milicias “fuera de las operaciones ofensivas” tanto en “Siria como en Iraq”, e insistió en la necesidad de “terminar con el apoyo” del país persa a la milicia chií libanesa Hizbulá.
Israel y EU comparten posición respecto a Irán, sobre el que el presidente estadounidense, Donald Trump, impuso una primera tanda de sanciones el pasado 7 de agosto, tras su salida en mayo del pacto nuclear firmado en 2015 por Teherán y el G5+1.
Las tensiones entre Israel e Irán han escalado los últimos meses en el conflicto armado de Siria, donde las autoridades israelíes no han dudado en atacar objetivos iraníes para impedir que Teherán establezca sus bases cerca de sus fronteras, y recientemente las unidades persas se han retirado a 85 kilómetros de los Altos del Golán, bajo ocupación israelí, tras un acuerdo con Rusia.
aarl