En su primera aparición pública tras haber pasado más de cinco años en prisión, Elba Esther Gordillo ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), dijo que al recuperar la libertad la reforma educativa se ha derrumbado y resaltó que defenderá los derechos de los docentes.
“A las maestras y a los maestros de México les pido que en este inicio de clases pongan lo mejor de sí mismos (…) entréguense a los niños y a las niñas con la tranquilidad de que sus preocupaciones hoy deberán ser fielmente defendidas; sus derechos los defenderemos con puntualidad; la dignidad del magisterio se volverá a valorar”.
Ante más de 400 personas en su mayoría profesores del Sindicato que se dieron cita en un hotel de Polanco, se dijo objeto de una persecución política, de acoso e injusticia; “fui un chivo expiatorio al que se le culpó de todo”.