Los cuerpos de los linchados en Acatlán de Osorio, Alberto Flores Morales y Ricardo Flores Rodríguez de 53 y 21 años de edad, fueron sepultados en el panteón de Tianguistengo.
Entre gritos de “Acatlán de Osorio, se volvió un pueblo de asesinos” despidieron a los hombres que fueron linchados en el municipio de Puebla donde se les acuso de ser robachicos.
La madre del joven de 21 años exigió justicia: “Los que cometieron estos actos, los que gritaron que los mataran, los que aplaudieron, todos los involucrados nunca van a dormir tranquilos, porque son asesino. Reflexionemos antes de hacer algo de lo que podamos arrepentirnos toda nuestra dichosa vida, primero investiguemos y luego hagamos lo que se deba hacer: justicia”, comentó
Se celebró una misa de cuerpo presente, en la que el sacerdote exigió el perdón, además recordó la pasión y muerte de Jesucristo como referencia.
DAMG