Oaxaca 7/S … Primero los civiles

Militares siguen en la reconstrucción

Hace casi un año, durante los sismos del 7 y 23 de septiembre de 2017 (de 8.2 y 6.1 de magnitud, respectivamente), varias instalaciones del Cuartel General de la 46/a Zona Militar, ubicada en Ixtepec, Oaxaca, sufrieron daños considerables, como fue el caso de la unidad habitacional (integrada por 22 edificios), la Base Aérea e instalaciones del 98° Batallón de Infantería, del 13° Regimiento de Caballería Motorizada y de la Policía Militar, que colapsaron.

Esto no impidió a las tropas del Ejército acantonadas en la base desplegarse inmediatamente para implementar el Plan de Auxilio a la Población Civil en Casos de Desastre (DN-III-E), para apoyar a los afectados por el sismo en la región del Istmo de Tehuantepec.

El teniente coronel de Infantería Diplomado Estado Mayor Zenón Cisneros Martínez, explicó que durante la emergencia los soldados instalaron albergues con una capacidad total de 13 mil 800 personas, además de poner en funcionamiento 32 células de intendencia y tres cocinas comunitarias, que repartieron 253 mil 214 raciones de comida a la población damnificada.

“Desde que ingresamos a las Fuerzas Armadas, nosotros sabemos que nuestra misión es servirle a nuestra gente, que nuestra gente esté bien. Nosotros no somos mártires, pero tenemos la capacidad para no exigir muchas comodidades”, expresó en una entrevista con 24 HORAS.

Indicó que, entre otras actividades, el personal de la VIII Región Militar (a la que pertenece la 46/a Zona) realizó la entrega de despensas, agua potable y papel de baño, además de actividades de labor social como 531 cortes de pelo, 25 consultas odontológicas y 232 consultas médicas.

Los soldados también trabajaron en el retiro de escombros, utilizando cinco retroexcavadoras con oruga, cuatro cargadores frontales, dos tractores bulldozer, seis camiones de volteo, un vibrocompactador y una motoniveladora, maquinaría perteneciente a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

“El Plan DN-III-E abarca todas las fases de prevención, auxilio y de recuperación, y en cada una de éstas se implementan diversos servicios: en la fase de auxilio lo prioritario es salvar vidas. Después vienen los servicios complementarios, como son el médico y el psicológico. Luego sigue la fase de reconstrucción, y actualmente las tropas siguen prestando este servicio en Oaxaca”, resaltó el militar.

Por su parte, el general de División Diplomado del Estado Mayor Alfonso Duarte Múgica, informó que bajo la dirección de ingenieros militares se está llevando a cabo la reconstrucción del Hospital General Macedonio Benítez Fuentes, en Juchitán; el Hospital de la Mujer Oaxaqueña, en San Bartolo Coyotepec (con una inversión de 217 millones de pesos), y que ya concluyó la construcción del Centro Escolar de Juchitán, el cual ya está funcionando.

“En lo particular y para todo el personal de la VIII Región Militar, es motivo de gran satisfacción, como profesionales que somos, como una institución militar que está al servicio del pueblo de México. Nos sentimos bastantes satisfechos de que la población civil reconozca el trabajo que el soldado ha realizado en favor de las familias del Istmo de Oaxaca”, remarcó.

Primero los civiles

El teniente coronel Cisneros Martínez informó que, luego de atender la emergencia, los militares dejaron hasta el último la reparación de sus propias instalaciones, a través de los recursos del Fondo de Desastres (Fonden); actualmente se encuentran reconstruidos los hangares de la Base Área Militar N.2 y algunas instalaciones estratégicas como depósitos y comandancias del 13° Regimiento de Caballería Motorizada y del 98° Batallón de Infantería.

“La Sedena, a través de la Unidad de Ingenieros Militares, está llevando a cabo las reparaciones, las cuales se realizan con obra de mano castrense para economizar los recursos”, informó.

Otra prioridad fue volver a levantar la unidad habitacional militar, que se edificó en una nueva superficie de cinco mil 820 metros cuadrados para 60 casas y tres edificios de 12 viviendas cada uno; además de una caseta de vigilancia, módulo de convivencia y juegos infantiles, con el objetivo de cubrir la necesidad de vivienda digna para las familias de militares afectadas.

“La Sedena también se preocupó por nuestras familias, la Unidad Habitacional, que en su momento fue afectada, ya está totalmente construida. Eso me da a mí la confianza y la moral suficiente para saber que mi familia está bien y yo puedo ayudar al 100%”, expresó.

Otro de los edificios afectados fue el del 98° Batallón, el cual se demolió para dar paso a las nuevas instalaciones del Cuartel General de la 46° Zona Militar, el cual se encuentra en fase de reconstrucción”, explicó el teniente Zenón.

“(El inmueble del) 98° batallón de Infantería es uno de los más representativos de Ciudad Ixtepec, ya que data de mediados del siglo pasado; no resistió los movimientos sismológicos y las réplicas, por lo que para salvaguardar la integridad física del personal militar y los transeúntes se optó por su demolición”.

“En este batallón tuvieron estancia tres militares que después serían presidentes de México: Abelardo L. Rodríguez, Lázaro Cárdenas del Río y Manuel Ávila Camacho, quienes vivieron en la casa que fue el Casino Militar”, comentó el teniente coronel.