Silvia Vargas Escalera, hija del empresario Nelson Vargas, fue secuestrada el 10 de septiembre de 2007, cuando se dirigía de su casa al colegio, en el sur de la Ciudad de México.
Más de un año después su cuerpo fue encontrado en una casa de seguridad en San Miguel Xicalco, en Tlalpan y, de acuerdo con el entonces secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, los plagiarios y responsables de cometer el asesinato habían sido integrantes de la banda de Los Rojos.
En su décimo primer aniversario luctuoso, el ex director de la Comisión Nacional del Deporte ofreció una conferencia de prensa, donde informó que están pendientes de cumplimentarse tres órdenes de aprehensión en contra de los integrantes del grupo criminal que secuestró y asesinó a su hija.
Precisó Vargas que sólo uno de los responsables ha sido sentenciado, mientras los tres restantes
siguen sin ser juzgados. “Es increíble y en verdad lastima”.
Han pasado dos sexenios, dijo el empresario, y ninguna autoridad ha puesto empeño en resolver el caso, y castigar a los responsables, sobre todo, cuando los hermanos Cándido, Raúl y Óscar Ortiz González “declarados formalmente presos desde 2019 por secuestro, y quienes confesaron su intervención y se identificaron entre ellos, pese a la aceptación de su responsabilidad aún continúan sin recibir sentencia por los delitos que cometieron.
La familia Vargas Escalera pide a las autoridades que se castigue a los responsables del secuestro y asesinato de su hija, sentenció Nelsón Vargas.
LEG