El presidente Enrique Peña Nieto encabezó el izamiento de bandera a media asta, en el Zócalo de la Ciudad de México, en honor a las víctimas de los terremotos de 1985 y 2017.
A las 7:18 horas de ayer, el mandatario nacional salió de la puerta principal de Palacio Nacional y caminó al centro de la plancha del Zócalo para activar el mecanismo de izamiento.
La bandera ondeó a media asta a las 7:19, como señal de luto por las personas que perdieron la vida en el sismo de 1985, que ocurrió a la misma hora hace 33 años, así como por las que fallecieron a causa de los temblores del 7 y 19 de septiembre 2017.
Para finalizar la ceremonia solemne, que duró ocho minutos, la banda militar realizó los honores al Presidente, entonó el Toque de Silencio y el Himno Nacional.
Antes de retirarse, Peña Nieto saludó a los asistentes –en su mayoría rescatistas y funcionarios– y les pidió estar atentos al minuto de silencio que se realizó a las 13:14 horas, así como al simulacro de las 13:16 horas, en recuerdo del sismo del 19 de septiembre 2017, que dejó 369 víctimas.
En el acto también estuvieron presentes los secretarios de Gobernación, Alfonso Navarrete; Marina, Vidal Francisco Soberón; Defensa, Salvador Cienfuegos, así como el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, y el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva.
Tras la ceremonia, los perros rescatistas del Ejército y Marina, como Frida y Evil dieron una demostración de su entrenamiento en la plancha del Zócalo, donde los asistentes observaron cómo se preparan para la búsqueda de sobrevivientes de entre los escombros.
Otra ceremonia
Por separado, en la Plaza de la Solidaridad, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva, encabezó otra ceremonia en honor a las víctimas del sismo de 1985.
En el lugar, donde se derrumbó el hotel Ritz hace 33 años, las autoridades colocaron una ofrenda floral para recordar a las víctimas de los movimientos telúricos.
También se entonó el Himno Nacional, decenas de vehículos de auxilio encendieron sus sirenas y se realizó una guardia de honor en recuerdo de las más de 10 mil víctimas del terremoto de 1985.
LEG