Moscú.- Rusia advirtió hoy a Estados Unidos de que deje de jugar con fuego después de la imposición de una nueva tanda de sanciones contra individuos y empresas rusas por parte de Washington.
En un comunicado publicado en la web del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, el vicecanciller Serguéi Riabkov pidió a Washington que no se olvide de conceptos como la estabilidad global que -dijo- está socavando con sus acciones contra Rusia.
EU impuso ayer sanciones a 33 individuos y compañías por sus lazos con el Kremlin, entre los que figura el empresario Yevgeny Prigozhin, acusado por la prensa occidental de ser el artífice de la campaña de desinformación contra EU en internet.
Se trata de la tanda de restricciones “número 60” que EU aplica a Rusia desde 2011, indicó Riabkov, lo que hace pensar que esa política ya se ha convertido en una especie de “entretenimiento nacional”.
En opinión del “número dos” de la diplomacia rusa, cada nueva ronda de sanciones certifica la falta del efecto de la anterior y las “numerosas listas negras de EU se repiten cada vez más”.
Para Riabkov, los autores de las sanciones contra Rusia esperan “imponer sus condiciones a Rusia, “ejerciendo un poquito más de presión”, pero “nunca y nadie lo va a conseguir”, aseveró.
“Recomendamos a los operarios de la maquinaria de sanciones en Washington a echar un breve vistazo a nuestra historia y dejar de hacer ruido inútilmente”, señaló.
Aparte de Prigozhin, apodado como el “chef” del presidente ruso, Vladímir Putin, también figuran entre los sancionados por EU 24 rusos que han sido acusados de influir en los comicios de 2016 por el fiscal especial Robert Mueller, encargado de investigar si hubo algún tipo de coordinación entre el Kremlin y miembros de la campaña del ahora presidente, Donald Trump, durante esas elecciones.
Entre las empresas de Rusia golpeadas por las nuevas restricciones destacan el Grupo Wagner, una compañía de seguridad privada que supuestamente Moscú usa para combatir en Siria, así como Oboronlogistika 000, que ofrece alimentación y transporte a las tropas rusas en Crimea y KnAAPO, que fabrica aeronaves en territorio ruso.
Además, EU impuso sanciones a la compañía china Equipment Development Department (EDD) y a su director, Li Shangfu, por haber comprado armamento a la empresa estatal Rosoboronexport, la mayor exportadora rusa de armas que anteriormente había sido sancionada por Washington.
A este respecto, en Moscú opinaron que las restricciones no repercutirán en la futura entrega a China de los cazas rusos Sukhoi Su-35 y los misiles S-400.
“Estoy convencido de que esos contratos se cumplirán en plazos acordados”, dijo a los medios el senador ruso, Franz Klintsevich.
Para Klintsevich, las nuevas sanciones de EU no son más que una muestra de “competencia desleal”.
fahl