La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, aseveró hoy, en el inicio de un nuevo paro sindical de 24 horas contra el Gobierno, que la actitud de su cartera es “trabajar por el orden” para impedir cortes de puentes o carreteras que no dejen pasar a quien quiera ir a su trabajo.
“La actitud del Ministerio, más allá de que podamos tener algún problema, es que la gente pueda circular, que no haya tomas de puentes ni autopistas nacionales o federales con el objetivo de permitir que no condicionen los derechos de la gente”, expresó Bullrich en declaraciones al canal TN.
Aunque la huelga convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) no incluye movilizaciones, organizaciones de izquierda llevan a cabo diversos cortes y manifestaciones en lugares como el puente Pueyrredón, una de las entradas a Buenos Aires, donde ya han aparecido las primeras tensiones con las fuerzas de seguridad.
“La mayoría de los manifestantes están abajo del puente. Arriba colocaron de manera ilegal algunos autos que van a ser sacados del lugar”, aseveró la ministra, quien destacó que hay policía en varios puntos del país para evitar conflictos y tratar de despejar el tránsito en las vías más cruciales, ya que la decisión, continuó, es que “no haya cortes” y permitir “que la gente que quiera trabajar lo pueda hacer”.
Las calles más transitadas de la capital y las principales ciudades argentinas amanecieron con una inusitada tranquilidad durante el cuarto paro general que los sindicatos convocan contra el Gobierno de Mauricio Macri, una medida que se refleja especialmente la ausencia de transporte público.
Bullrich lamentó la “obstrucción permanente al Gobierno, diaria cotidiana y sistemática que no para”.
“Todos los días hay una manifestación, una marcha, van cuatro paros generales. Todos los discursos van a decir ‘queremos sacar al Gobierno'”, señaló.
“Nosotros vamos a defender nuestro Gobierno. Como ministra de Seguridad me toca trabajar por el orden, más allá de todas las dificultades que tengamos, la gente tiene que saber que esa es la actitud, dejar vivir en un país tomado en el que no sé de dónde sacan el dinero para manifestarse todos los días a cada hora en una situación violenta”, agregó.
Ya este lunes se produjeron grandes movilizaciones impulsadas por la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) y la CTA-Autónoma -organizaciones que integran principalmente a empleados del sector público-, que iniciaron además un paro de actividades de 36 horas.
No obstante, por la tarde se registró un ataque a una sede de la Gendarmería en Buenos Aires, con bombas molotov, un suceso que no dejó heridos ni detenidos y que Bullrich aseguró se está investigando.
“Esa gente no vino de la nada. Los responsables de la marcha tiene que hacerse cargo de lo que llevan adentro de sus marchas”, subrayó.
Los sindicatos protestan contra los ajustes planteados por el Ejecutivo, que ya negocia en el Congreso la aprobación de un austero Presupuesto para 2019 en medio de la crisis que afecta al país por la abrupta devaluación del peso, la alta inflación, la bajada del poder adquisitivo y la caída de la actividad económica.
aarl