Al comparecer ante la Cámara de Diputados que ahora tiene mayoría morenista y no priista, Eviel Pérez Magaña, titular de la Secretaría de Desarrollo Social, afirmó que el Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto entrega un legado en política social que se traduce en la reducción de la pobreza extrema y la disminución de las carencias sociales.
Entre las cifras que destacó se encuentran 2.2 millones de mexicanos que dejaron la pobreza extrema, 6.2 millones que ahora cuentan con servicio de salud, 4.5 millones que ya no son pobres ni vulnerables; la reducción de 70 a 65 años de edad para otorgar la pensión a adultos mayores y el seguro de vida para jefas de familia.
La realidad del país para la mayoría de los diputados federales es otra, toda vez que Pérez Magaña recibió reclamos por parte de los grupos parlamentarios, excepto PRI, por la política social de la actual administración, así como por casos de corrupción, como la llamada Estafa Maestra.
La legisladora Dulce María Villegas (Morena) mencionó que los supuestos avances sociales están exclusivamente en la imaginación del Presidente y su equipo.
Señaló que el Gobierno se congratula de una reducción de la pobreza de menos de 2%, entre 2012 y 2016; sin embargo, “para lograr esta aparente y precaria disminución de la pobreza tuvo que orquestarse una ominosa operación de estado para cambiar la metodología de medición de las carencias en México”.
Otro tema que causó revuelo fue cuando el secretario mencionó la entrega de 10 mil viviendas para los damnificados del sismo del 19-S, por lo cual Gerardo Fernández Noroña (PT), le espetó que mentía y le exigió conocer en qué estados, municipios y colonias se encontraban.
Sobre los casos de corrupción que señalan a Rosario Robles, su antecesora, el secretario dijo que en la Sedesol hay disposición para dotar de información y documentación a las autoridades competentes.
LEG