Muchos son los enfrentamientos que se dan bajo el nombre de David vs. Goliat en el futbol mundial, más en la actualidad donde los magnates de diversos rubros han puesto su inversión en equipos de tradición para dejar a los modestos con una brecha más extensa para aspirar a los trofeos que bajo esta tendencia parecen reservados en exclusiva para los poderosos.
Afortunadamente para la afición que cree en la nobleza del futbol sin importar los montones de billetes como respaldo, se dan de manera muy escasa encuentros en los que los humildes les quitan un poco de alegría los perversos que a punta de dinero se la han arrebatado. Un claro ejemplo se suscitó en Old Trafford por la Carabao Cup.
El Teatro de los Sueños vio a sus Red Devils saltar al campo para disputar el partido de la tercera ronda de la Copa de la Liga ante el Derby County, equipo que disputa la Championship, el equivalente a la segunda división inglesa. El cotejo tenía un ingrediente especial. Precisamente el Special One, José Mourinho enfrentó por primera vez a su ahora colega Frank Lampard, quien está en el banquillo del Derby County.
Mou y Lampard ganaron la Premier con el Chelsea. El portugués como técnico y el inglés como jugador de aquel equipo campeón en 2005 y 2006. Ahora la victoria de uno perjudicó al otro. Ya no pueden ni siquiera dividir puntos.
La velada en Manchester inició como muchos suponían: con el Man U al frente en el marcador, y muy pronto. Juan Mata puso el primero de los locales al minuto 3, pero la cuota no aumentó en los minutos consecutivos. De hecho, el primer tiempo concluyó solo con ese tanto en el marcador.
Fue en la segunda parte que los hombres de Lampard le regalaron a su afición el tan anhelado momento. Harry Wilson cobró un tiro libre que batió a Sergio Romero para igualar el marcador. Fue el mismo Romero que protagonizó la siguiente postal. El argentino fue expulsado al minuto 67 por tocar la pelota con la mano fuera de su área.
Jack Marriot anotó el segundo tanto del Derby, y cuando parecía que la campanada se decretaba en los 90 minutos, Mourane Fellaini marcó el empate al minuto 95. Los penales aguardaban una definición cardíaca, para no desentonar con la tradición de esta instancia.
Una tanda impecable. Eso se labró con el cobro impecable de los tiros desde los 11 pasos que uno tras otro ponían el balón en la red. El Derby anotaba y el United los alcanzaba. Uno, dos, tres penales, también el cuarto. No había falla. Fue hasta el octavo cobro de los Red Devils que Phil Jones erró y los humildes visitantes de la categoría inferior eliminaron al todopoderoso del balompié inglés.
El Derby County sigue, el Man U tiene una competencia menos por la cual preocuparse, algo que lejos de ser un alivio, en las oficinas de Old Trafford es un golpe durísimo. El alumno continúa, el maestro está eliminado.
LEG