La formaciones opositoras de derecha Partido Popular y Ciudadanos aumentaron hoy su presión al gobierno del socialista Pedro Sánchez, para que dimita y convoque elecciones anticipadas, por considerarlo un ejecutivo débil sin apoyos para ejercer.
Los argumentos de los dirigentes y portavoces de PP y Ciudadanos se basan en el desacuerdo con la política de Sánchez hacia Cataluña, que acusan es más flexible con el independentismo, su rechazo a propuestas económicas y fiscales, y la descalificación que hacen a los ministros de Sánchez.
En la sesión de control al gobierno de este miércoles en el Congreso de los Diputados (a la que no asistió Sánchez por estar de viaje en la Asamblea de la ONU en Nueva York), las preguntas de estos partidos políticos coincidían en concluir con una frase: “convoquen elecciones ya”.
El principal objeto de críticas está enfocado a la ministra de Justicia, Dolores Delgado, a la que reprobó el martes en el Senado acusada de no defender al juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, de denuncias penales que dirigentes independentistas catalanes han interpuesto en su contra.
Asimismo, le acusan de mentir sobre su relación con un ex comisario de Policía, José Manuel Villarejo, en prisión por varios delitos de organización criminal y otros, y al que se señala de ser un operador de “las cloacas” de la inteligencia policial por décadas en España.
El portal digital Moncloa.com difundió conversaciones de ella con Villarejo en una comida el año 2009, en las que estaba presente el entonces juez Baltasar Garzón, en las que Delgado califica al actual ministro de Interior y ex juez, Fernando Grande Marlaska, como “maricón”.
“Es usted una rémora, un zombi, su presencia aquí mancilla esta cámara. Váyase”, manifestó el diputado del PP, Rafael Hernando en su pregunta.
La portavoz del PP, Dolors Montserrat, calificó al gobierno de “vergüenza” por tener dos dimisiones de ministros en 100 días (Máxim Huerta en el Ministerio de Cultura y Carmen Montón en el de Sanidad) y de tener “una tercera en camino” de Delgado en el de Justicia.
El portavoz de Ciudadanos, José Manuel Villegas, consideró que España vive un gobierno “con tres crisis, una de confianza, una institucional y una territorial, por lo que los españoles no aguantan más”.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, expresó en posterior rueda de prensa: “Queremos que los españoles escojan y decidan; y por eso le pedimos a Sánchez que deje de atrincherarse en Moncloa y nos deje ir a las urnas. El que nos vendieron como gobierno de las estrellas está demostrando ser el gobierno estrellado”.
La sesión de control al gobierno coincidió con una moción que presentó el PP para que Delgado dimita, por su inicial desinterés en defender al juez Llarena de las acusaciones de los independentistas catalanes.
Tanto PP como Ciudadanos acusan a Sánchez de ceder a muchas de las presiones de los independentistas catalanes, como acercar a los presos a cárceles de Cataluña y no actuar ante la reorganización que hace la Generalitat de sus planes secesionistas.
En su viaje en Nueva York, Sánchez aseguró que gobierno es fuerte, cuenta con apoyos parlamentarios para sacar adelante muchos de sus proyectos y que no piensa dimitir.
“Sí me voy a quedar hasta 2020. No voy a convocar elecciones, no. Cuando leo los periódicos diciendo que tengo que convocar elecciones, pienso, bueno, quien sufre es la oposición, no el gobierno”, expuso el mandatario.
TFA