OTTAWA.- En un recuento de logros frente a concesiones, el gobierno canadiense resaltó que bajo el nuevo Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA), Washington no aplicará la sección 232 de la Ley de Expansión de Comercio a las exportaciones de automóviles y autopartes de Canadá.
“Canadá ha preservado con éxito los elementos clave del TLCAN original, al tiempo que se basa en el acuerdo para ampliar las oportunidades y mejorar las protecciones para los trabajadores en toda América del Norte”, señaló en un comunicado del gobierno de Ottawa.
Agregó que el pacto resultante “ofrece una capacidad de predicción y estabilidad crucial” para las empresas, inversores, comerciantes, trabajadores e innovadores canadienses.
En conferencia de prensa, el primer ministro Justin Trudeau y la negociadora Chrystia Freeland resaltaron la “victoria” canadiense de haber podido mantener “intacto” el Capítulo 19 de resolución de disputas, mismo que el gobierno de Donald Trump quería dejar fuera.
También aclararon que la aplicación de la sección 232, que llevó a imponer el 10% de aranceles al aluminio y 20% al acero bajo la excusa de seguridad de Estados Unidos, no formó parte de las negociaciones para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Agregaron que el gobierno canadiense seguirá presionando para lograr una exención de dichas tarifas.
La sección 232 aplicada a las exportaciones canadienses de acero y aluminio es “ilegal y totalmente injusta” porque Canadá no es una amenaza para la seguridad de Estados Unidos, país con el que comparte programas de defensa hemisféricos, afirmó el embajador de Canadá en Washington, David MacNaughton.
El diplomático rechazó las afirmaciones de Trump en el sentido de que México y Canadá accedieron a sus demandas debido a sus tarifas y la amenaza de hacer lo mismo con el sector automotriz.
“Llevábamos 14 meses de negociaciones y la imposición de aranceles al acero y aluminio sólo empeoró las cosas”, aclaró en declaraciones a la televisora CBC. Asimismo, desestimó las críticas de la oposición parlamentaria en el sentido de que Canadá sólo concedió y no ganó.
Con el USMCA “habrá grandes ganancias, pues en los años recientes vimos pérdidas de empleos en la industria automotriz canadiense”, precisó.
El gobierno canadiense defendió lo alcanzado en este nuevo acuerdo trilateral, sobre todo en áreas clave, como reglas de origen en manufactura automotriz, agricultura, derechos laborales, propiedad intelectual, industria cultural y mecanismo de disputas.
Sin embargo, la concesión en el sector de lácteros y extensión de patentes fueron resaltados negativamente por la oposición conservadora e, incluso, por el gobernador de Quebec de afiliación liberal, Philippe Couillard.
Ottawa también accedió a eliminar del acuerdo sus categorías de leche Clase 6 y Clase 7, así como los calendarios de precios asociados para la leche desnatada, proteínas de leche desnatada y otros componentes y leche ultrafiltrada, dentro de los seis meses posteriores a la entrada en vigencia del USMCA.
DPC