El presidente estadounidense, Donald Trump, presumió hoy de ser abstemio hasta el punto de no haber bebido ni “una cerveza” en su vida, y dijo que sería “un desastre” si lo hubiera hecho.
“Yo no bebo. Puedo decir honestamente que no he bebido ni una cerveza en mi vida. Es una de mis pocas virtudes”, dijo Trump durante una conferencia de prensa.
“Nunca he tomado una copa de alcohol. Nunca he tomado alcohol, por la razón que sea. ¿Pueden imaginarse si lo hubiera hecho? Vaya desastre sería. Sería el peor del mundo”, agregó.
Trump hizo esos comentarios mientras respondía a una pregunta sobre su nominado al Tribunal Supremo de EE.UU., Brett Kavanaugh, que ha sido acusado por varias mujeres de cometer abusos sexuales contra ellas cuando se encontraba supuestamente bajo los efectos del alcohol.
El mandatario opinó que, en una audiencia sobre ese asunto en el Senado el pasado jueves, Kavanaugh “dejó claro que le gusta la cerveza, y que ha tenido algunas dificultades” con el alcohol.
“Éste no es un hombre que haya dicho que es perfecto con respecto al alcohol”, subrayó Trump, pero opinó que eso no debería impedir a la gente “hacer lo que quiere hacer con su vida”.
Trump ha reconocido en varias ocasiones que la razón por la que es abstemio es que su hermano mayor, Fred, murió debido al alcoholismo cuando tenía 43 años.
“Él tenía un problema con el alcohol y me decía: no bebas, no bebas”, recordó el mandatario en un discurso en octubre de 2017.
aarl