Brett Kavanaugh, el nominado del presidente estadounidense Donald Trump a la Corte Suprema, logró hoy pasar el último obstáculo procedimental que allana el camino para el voto de confirmación de mañana sábado por el pleno del Senado.
Con 51 votos a favor (50 republicanos y el demócrata Joe Manchin) y 49 en contra (48 demócratas y la republicana Lisa Murkowski), el Senado tendrá 30 horas finales de debate parlamentario antes del voto definitivo mañana sábado.
Sin embargo, una de las senadoras indecisas, la republicana de Maine, Susan Collins, anunció poco antes del voto que dará a conocer su decisión final a las 15:00 horas locales de este viernes.
Bajo las reglas del Senado es posible que un legislador vote a favor del cierre de debate, pero vote en contra del nominado en el voto final, o viceversa.
Pero el hecho de que dos republicanos indecisos, el de Arizona, Jeff Flake, y la senadora Collins votaron a favor del voto final y se habían declarado satisfechos con la investigación de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), sugiere que mejoraron las probabilidades de confirmación final de Kavanaugh.
El senador Manchin fue el único demócrata en votar a favor de Kavanaugh, toda vez que aspira a reelegirse el mes próximo en su estado de Virginia del Oeste, que votó a favor de Trump en 2016, y donde es amplio el apoyo a favor del nominado presidencial.
La eventual confirmación de Kavanaugh es vista como un triunfo político para el presidente Trump, porque habría logrado colocar a dos de sus nominados conservadores, el magistrado Neil Gorsuch, y Brett Kavanaugh en los primeros dos años de su gobierno.
Asimismo, sería una victoria para los republicanos, que buscan temas ganadores para alentar a su base conservadora a salir a votar en las elecciones del 6 de noviembre próximo, en momentos que las encuestas muestran a los demócratas en la delantera para recuperar la Cámara Baja.
Antes del voto, el líder de los demócratas en el Senado, Charles Schumer, calificó la nominación de Kavanaugh como “uno de los más tristes y más sórdidos capítulos en la historia judicial”.
Kavanaugh fue acusado por la doctora Christine Blasey Ford de tratar de violarla hace 36 años, una denuncia que reenergizó al movimiento MeToo y detonó multitudinarias protestas contra Kavanaugh en el Congreso. Sólo el jueves fueron arrestadas 302 activistas.
TFA