París.- La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) solicitó hoy de manera formal a China información sobre el paradero del presidente de la agencia, Meng Hongwei, quien desapareció la semana pasada en un viaje al país asiático, un caso en el que Beijing ha guardado silencio.
La desaparición de Meng fue hecha pública la víspera cuando las autoridades francesas anunciaron la apertura de una investigación sobre el destino del presidente de la Interpol, cuya familia dio parte a la policía en la ciudad de Lyon, precisando que no había tenido contacto con él desde que viajó a China.
De hecho, Meng, de 64 años, fue visto por última vez en Lyon, la sede de operaciones de la organización internacional de cooperación policial, a finales de septiembre, cuando viajó rumbo a China.
De acuerdo con reportes de la prensa francesa, que citan información del periódico South China Morning Post, Meng habría sido detenido para ser interrogado por las autoridades chinas, pero que se desconocía el motivo y el lugar donde se encontraría.
Hasta ahora, el gobierno chino y los medios de comunicación estatales no se han pronunciado públicamente sobre el caso, por lo cual la Interpol afirmó que se trataba de “un asunto relevante que implicaba a las autoridades tanto en Francia como en China”.
El sitio web de la Interpol señala que Meng tiene casi 40 años de experiencia en justicia penal y vigilancia policial, además de que ha supervisado asuntos relacionados con instituciones legales, control de narcóticos y contraterrorismo.
Meng cumplió un largo periodo como viceministro de seguridad pública en China antes de ser nombrado presidente de la Interpol, por lo que se especula que su presunta detención e interrogatorio en ese país podrían estar relacionados con la campaña anticorrupción que Beijing lleva a cabo.
En un comunicado, Jürgen Stock, secretario general de la Interpol, aseguró estar esperando “una respuesta oficial de las autoridades chinas a las inquietudes de Interpol sobre el destino de su presidente”.
La familia de Meng no ha tenido noticias de él desde el 25 de septiembre pasado, cuando se embarcó en el aeropuerto de Estocolmo, Suecia, rumbo a China, pero reportó su desaparición a la policía apenas hace dos días, por lo que el fiscal de Lyon abrió una investigación el viernes.
Los investigadores de la Dirección interregional de la Policía Judicial de Lyon, asignados al caso, estiman que se trata de una puesta en custodia por los servicios chinos que podría estar basada en las normas internas chinas.
fahl